Como un paréntesis en el camino en la búsqueda de la paz, fue calificado por monseñor Juan Vicente Córdoba Villota el actual momento que vive el país.
“En este momento vemos que las cosas están como en remojo, como entre paréntesis, el Presidente quiere el diálogo, quiere que haya mesas de diálogo, quisiera él que se den los pasos hacia una paz; quiere que la Iglesia, si se llega a eso, sea facilitadora, pero nos ha dicho que hasta que no tenga las circunstancias, las condiciones claras, no da el paso, y que no quiere que nadie haga diálogos ni tome iniciativas sin su anuencia, sin su permiso, digamos, y que él todavía no ve las condiciones. En el momento en que las condiciones estén vistas podría dar el paso”, señaló el también secretario General de la Conferencia Episcopal de Colombia.
Añadió que la Iglesia acata la voluntad presidencial en este sentido y se declara lista en el momento que sea llamada para brindar su aporte a la paz de Colombia.
Sin embargo, según monseñor Córdoba Villota, “como veo las cosas, como ha habido tantas confrontaciones, tantas dificultades y nuevas arremetidas y nuevas acciones bélicas, entonces vemos que la cosa puede estar un poquito entre paréntesis; nosotros simplemente estamos dispuestos cuando el Presidente lo diga”.
El día de su posesión, el 7 de agosto de 2010, el presidente Santos dijo que mantendría la presión sobre los grupos armados ilegales, sin descartar avanzar en un proceso de paz con las guerrillas si cesaban en sus acciones terroristas.
Sin embargo, durante su Gobierno se han recrudecido las acciones de la guerrilla en diferentes regiones como el departamento del Cauca y Nariño en el sur, y en la Costa Norte.
A mediados de agosto pasado, a través de un video colgado en la página de Anncol, el máximo jefe de las Farc, Alfonso Cano, dijo que esta organización está dispuesta a iniciar un diálogo de paz con el actual Gobierno, aunque en referencia a Santos señaló que “hace un año, en su discurso de posesión, prometió dejar atrás los odios que habían caracterizado los ocho años del anterior Gobierno (el de Álvaro Uribe). Esa promesa la olvidó”.