UE: inversionistas vuelven pese a crisis | El Nuevo Siglo
Viernes, 2 de Noviembre de 2012

Tranquilizados por el voluntarismo del BCE, los grandes inversores internacionales, entre ellos los colosos de las finanzas, vuelven tímidamente a la zona euro desde hace unas semanas, pese a que la crisis no ha acabado.

"El peor de los escenarios se aleja un poco para aquellos que temían la desaparición del euro", dice Jean-Louis Mourier, economista de la agencia de corretaje Aurel BGC.

Los inversores han vuelto a comprar acciones de los bancos franceses, españoles o italianos, así como deuda de los países más frágiles, lo que ha contribuido desde el inicio del verano a un rebote de las bolsas y a la caída del rendimiento exigido para la deuda de España e Italia.

Jean-François Bay, director general de la firma de estudios Morningstar France, confirma que en septiembre se ha registrado un regreso de los fondos al mercado de renta variable en la zona euro, "algo sin precedentes desde febrero de 2001".

La tendencia también ha sido favorable para la deuda de los países del sur de Europa.

Los operadores son conscientes de que tienen en frente al Banco Central Europeo (BCE) que puede comprar deuda pública a corto plazo de manera ilimitada si un país lo solicita.

Esta posibilidad justificó la decisión de Pimco, el mayor gestor de deuda del mundo, de aconsejar la vuelta a España e Italia, después de haberlos denostado durante tres años.

En Francia, el mayor gestor de fondos independiente, Carmignac, anunció en septiembre que había comprado ese mes deuda de corto plazo de Italia. Incluso compra deuda española desde junio.

Por su parte, los fondos estadounidenses, que administran billones de dólares, aumentaron por tercer mes consecutivo en septiembre su exposición a los bancos de la zona euro, al 10,6% de sus exposiciones, según un estudio de la agencia de calificación Fitch.

"Numerosos inversores quizá habían exagerado el riesgo de la zona euro, aunque éste no ha desaparecido", alerta René Defossez, estratega de Natixis.

Se trataría, por tanto, más de oportunismo que de una verdadera convicción. "Esta vuelta de los inversores es muy frágil", dice Patrick Jacq, analista de BNP Paribas, que recuerda que los fondos pueden verse tentados a tomar beneficios con la misma rapidez que han vuelto a la zona euro.

"Es muy difícil prever si el movimiento iniciado recientemente va a proseguir", dice Bay.

Para algunos inversores, los activos de la zona euro quizá se han elegido automáticamente.

"Según el último sondeo del Bank of America-Merrill Lynch entre los fondos, el riesgo ligado al 'fiscal cliff' (fin de las ventajas fiscales y reducción de los gastos) en Estados Unidos es mayor que el de la zona euro", recuerda Mourier.

Fitch observa que de hecho, la exposición de los fondos monetarios estadounidenses a los bancos de la zona euro sigue siendo el 70% del nivel que había en mayo de 2011, mientras que las tasas que pagan los países frágiles por emitir deuda siguen siendo altas, pese a la distensión del mercado.

Hay que decir que "la zona euro estará en recesión el año próximo, contrariamente a Estados Unidos", lo que enfría los ánimos de los inversores, dice Defossez.

Sin contar que 2013 se anuncia como un año cargado de acontecimientos de riesgo por las elecciones en Italia y Alemania, así como un eventual plan de rescate para España.