Duelo presidencial evidenció una Venezuela partida políticamente en dos. Electo mandatario denuncia que oposición le pidió un pacto, lo que fue desmentido por el candidato del cambio.
Por un inesperado estrecho margen las presidenciales de Venezuela fueron ganadas por el oficialista Nicolás Maduro, triunfo que no será reconocido por su retador, el opositor Henrique Capriles sino hasta que se registre el reconteo del 100% de los votos, porque dijo que hubo “incidencias y anomalías” en las que están en juego 300 mil sufragios, lo que cambiaría el boletín oficial que entregó el Consejo Nacional Electoral.
"Tenemos el candidato Nicolás Maduro Moros con 7.505.338 votos, para el 50,66%, y el candidato Henrique Capriles Radonski con 7.270.403 votos, para el 49,07%", informó hacia las 11 y media de la noche la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, asegurando que se trata de resultados "irreversibles".
La participación fue del 78,71%, según la presidenta.
Es un triunfo "justo, legal, constitucional", que da a los chavistas una "legitimidad revolucionaria", aseguró Maduro, vestido con una chaqueta con los colores de la bandera venezolana en las afueras del palacio presidencial de Miraflores ante una multitud y acompañado de su esposa, Cilia Flores, llamada a ser en vez de la primera dama, "la primera combatiente", inmediatamente después del anuncio del CNE.
“En ocho elecciones en 14 años hemos tenido 17 victorias del pueblo y esta es una victoria de homenaje a nuestro comandante Hugo Chávez. Ahí está él en un balcón saludando al pueblo”, dijo Maduro en el mensaje a sus partidarios.
“En una democracia son los poderes públicos y en este caso el poder electoral el que dice el resultado. Yo lo dije, hice un gran esfuerzo recorriendo esta tierra bolivariana, con el dolor en el alma de la pérdida de nuestro comandante y enfrentando todas las guerras, primero una guerra eléctrica, iba a un estado y allí quitaban la luz dos días seguidos. Enfrentamos una guerra económica desde diciembre, saboteo del abastecimiento, dólar paralelo, saboteo en los productos de primera necesidad. Fue una burguesía que creyó que con el fallecimiento de Hugo Chávez había llegado al final la revolución del siglo XXI”, manifestó
También dijo que hubo una guerra sicológica y un intento de saboteo y que precisamente hoy fueron capturados unos colombianos que tenían esa intención y que “mañana lo vamos a mostrar”.
De otra parte informó que un vocero del comando de campaña del opositor Henrique Capriles lo llamó para hacer un "pacto" para realizar unas auditorías ante la pequeña diferencia en la votación que le dio el triunfo, pero que él le recordó que el Consejo Electoral ya tenía una tendencia irreversible y que su ventaja era de 250 mil votos.
Sin embargo dijo que accederá a que se realicen las auditorías electorales, pero que debe respetarse su triunfo, que aunque fue por menos de 2 puntos porcentuales, fue una victoria y recordó unos cuantos casos en que presidentes han ganado por mínimas diferencias, incluso 0.3% y han gobernado.
En un prolongado discurso que no logró arrancar ni las ovaciones ni los vivas que antaño hizo su antecesor, Maduro llamó a la paz y la unidad nacional, pero haciendo énfasis en que el poder popular y la revolución bolivariana no se detendrá.
“Llamo a la paz. Que nadie caiga en provocaciones. Mañana la vida continúa. Llamo a que no nos enredemos en un debate que pueda ser en un momento dado de mayor desgaste. Llamo a que hagamos un debate de lo que hay que hacer para fortalecer este hermoso país, para defender el legado del único hombre que protegió este pueblo y que un día partió de aquí”, manifestó.
"Dialogo bolivariano, sí siempre. Diálogo social y político con todo el pueblo. En la oposición hay voceros y cuando haya que hablar con ellos se hará, pero no para ponernos de acuerdo a espaldas de un pueblo", informó el nuevo presidente de Venezuela.
Insistió durante su prolongada intervención en el saboteo eléctrico y en una “operación internacional para atacar la democracia venezolana, pero nosotros somos fuertes y resistiremos. Lo juro aquí en el balcón del pueblo, yo seré el presidente de la paz de esta Patria. Creo en la paz como el único camino para los derechos del pueblo, el socialismo y la prosperidad. No tendré debilidades con nadie que quiera interferir. Sabremos qué hacer si alguien levanta su insolente voz contra el pueblo de Venezuela”
Su intervención improvisada no tuvo un hilo conductor ya que en varias ocasiones retomaba el tema del saboteo a la infraestructura eléctrica, los ataques a la oposición, su triunfo, la paz, la unidad, el trabajo mancomunado para sacar adelante la Nación.
En medio de su intervención instó a sus seguidores a entonar el himno patrio, que al mejor estilo de su mentor, con mano extendida en señal de victoria entonó con la emoción del ganador.
A renglón seguido lanzó un “viva Chávez, viva la revolución, viva el pueblo bolivariano”, con el se creyó iba a cerrar su intervención, pero volvió a insistir en que se los venezolanos se deben unir esfuerzos para “echar adelante esta Patria”.
Prosiguió con su discurso bolivariano que se prolongó por casi una hora, mientras en las calles los chavistas celebraban este triunfo en honor al mentor de la revolución bolivariana, el desaparecido pero siempre omnipresente Hugo Chávez.
Reconteo ara conocer la verdad: Capriles
Tranquilo y sonriente apareció ante los medios de comunicación el líder opositor Henrique Capriles, quien por segunda vez en menos de dos meses perdió su batalla electoral por la presidencia, pero que a diferencia de los comicios de octubre frente a Chávez, logró una mayor votación ante Maduro y estuvo a un escaso 1.5% de cumplir su sueño.
En su intervención, Capriles dijo que no reconocerá la victoria de Maduro hasta que el Consejo Nacional Electoral no haga el reconteo del 100% de los votos depositados por los venezolanos, ya que tras revisar las actas detectó “3.200 incidencias” que incidirán en el resultado y rechazó que hubiera propuesto un pacto al presidente interino y triunfador de la jornada democrática.
“Quiero arrancar diciendo que yo no pacto ni con la mentira ni con la corrupción. Mi pacto es con Dios y con los venezolanos. He escuchado el discurso de Maduro hablando de un supuesto pacto, yo no pacto con la ilegitimidad, con aquellos que yo considero que no son legítimos, con aquellos que han obtenido el resultado del Consejo Electoral con base en todas las incidencias de hoy. Estamos hablando de 3.200 incidencias”, indicó.
A renglón seguido le dijo a Maduro que “el derrotado del dìa de hoy es usted. Usted y su gobierno son los derrotados. Y lo digo con toda la firmeza, con todo el compromiso, con toda la transparencia. Nosotros no vamos a reconocer un resultado hasta tanto aquí no se cuente cada voto de los venezolanos, uno por uno. Le exigimos al CNE que se abran todas las cajas y que cada voto de Venezuela sea contado, el pueblo merece respeto”
Un enérgico Capriles agradeció el casi millón de votos del partido oficial que fueron depositados por su propuesta de gobierno y aseguró que “eso demuestra lo que está pasando en Venezuela, que el país está esperando respuestas. Aquí la foto el país es otra, yo respeto profundamente al pueblo que votó por otra opción pero también los que votaron por mì. Aquí tenemos un país por mitades. Estamos aquí para defender al pueblo que piensa de una forma diferente al gobierno”.
Fue por eso que en abierto mensaje al CNE señaló que “la paz del país está en que se conozca la verdad”
En otro aparte de su intervención dijo “señor Maduro si usted antes era ilegítimo hoy está más cargado de ilegitimidad. Nuestra buena intención ha querido ser tergiversada y mal ponerla frente al país, cosa que yo no le acepto porque yo no negocio ni hago pactos con nadie. Mi pacto es con Dios y con Venezuela”.
Insistió en que como un demócrata que es y en el marco del respeto de la Constitución y la ley mantendrá la lucha porque se conozca la verdad de la jornada electoral y que “si antes tenía ánimo y ganas de luchar, ustedes señores del gobierno hoy me dan más fuerza para continuar esta lucha”.
Así las cosas, la situación en Venezuela sigue como antaño aunque ya sin Chávez, es decir con un país polarizado políticamente. Sin embargo, de acuerdo con el resultado electoral, se evidencia que no sólo una oposición más cohesionada, sino que su candidato Capriles logró en una intensa y desigual campaña captar el voto de miles de chavistas.
Entre tanto se vislumbra que el ambiente de confrontación no cederá. Y es aquí donde Maduro deberá cambiar su actitud y su discurso si quiere, como lo expresó, mantener la paz y construir la unidad nacional.
Nunca podrá haber una reconciliación si no se reconoce a la otra parte. Y eso es precisamente lo que Maduro no hizo en su discurso del triunfo, pese a que es consciente de que representa la voluntad de la mitad del pueblo porque la otra mitad está con Capriles, como lo evidenció el resultado oficial del Consejo Nacional Electoral.
El presidente electo, ante los problemas que tiene por delante –que no son de fácil solución- y si realmente quiere sacar al país avante ante los inmensos retos de esta era post-Chávez, tiene que ser consciente que no logrará nada por la teoría de la confrontación. El consenso deberá ser su hoja de ruta.