Tortuosa renovación | El Nuevo Siglo
Martes, 16 de Julio de 2013

Tortuosa renovación. Caos total se vive en Bogotá ante el ultimátum impartido a la gente de tener que renovar la licencia de conducción, todo por la irresponsabilidad de un Ministerio que como el de Transporte, que a pesar de  tener claro de varios años atrás que esto se venía, no se preparó para atender una demanda que, en lo que respecta sólo a la gran capital, bordea los cinco millones de usuarios.

Calle destapada. En uno de los puntos de atención SIM,  son diez para toda ciudad, una usuaria fue a realizar los trámites de renovación. Para cumplir con el primer paso, que era diligenciar los exámenes médicos de rigor, llegó a las 7 de la mañana del martes y la atendieron a las 4 p.m. El miércoles llegó a las 7 a.m. al mismo sitio para hacer la segunda parte de la diligencia, que consiste en que el organismo de tránsito le expida el nuevo pase, y no alcanzó ficha, pues ya habían repartido las 180 de cada día. 

Los tramitadores. Las colas apenas comienzan y mientras los tramitadores se aprovechan de la situación y hacen su agosto con los desesperados usuarios, la ministra Cecilia Álvarez encabeza eventos, inspecciona obras y no responde el twitter que promocionan en la página de Internet como la gran ventana para acceder a ella. 

Ley anti-trámites. Según la normatividad que obliga a renovar el pase a todos los que lo tienen de cuarta categoría en adelante, para que les hagan los exámenes los ciudadanos deben acudir a uno de los  316 Centros de Reconocimiento de Conductores autorizados por el Mintransporte en el país.  

Estos centros deben inmediatamente subir los resultados al RUNT para que, en un segundo paso, el usuario acuda ante la autoridad de tránsito a que le expidan el pase y ésta cuente con la valoración médica en línea. En el momento de redactar esta información, ninguno de los 53 Centros de Reconocimiento que hay para Bogotá, es posible que esté pasando lo mismo en el resto del país, está en línea, es decir, no cuentan con la plataforma que les permita subir la información al Registro Único Nacional de Tránsito. Y todo a escasas horas de que millones de colombianos provoquen una avalancha en oficinas de tránsito y Centros de Reconocimiento tratando de ponerse al día.  

¿Quién responde? Nadie se responsabiliza de la situación. Un comunicado oficial asegura que el RUNT funciona normalmente y que “algunos Centros de Reconocimiento de Conductores presentan inconvenientes por el incumplimiento con los requisitos técnicos exigidos por el Ministerio de Transporte y la Superintendencia de Puertos y Transporte”.  En los  CRC aseguran, en cambio, que la plataforma aún no está lista, razón por la cual el Ministerio no la ha habilitado. Mientras tanto, el usuario, los varios millones de colombianos que tienen la obligación de renovar la licencia de conducción son los afectados y tienen que pagar con su tiempo, someterse a la mala atención y a los tramitadores, para tratar de ponerse al día.