La Gobernación del departamento de La Guajira, la Alcaldía de Riohacha y la Presidencia de la República colombiana en cooperación con la empresa privada iniciaron la recolección de ayuda para los habitantes de esta zona fronteriza con Venezuela que sufre por la falta de alimento, agua y combustible.
Desde que Venezuela ordenara la prohibición del ingreso de estos productos a Colombia, el hospital de Nazareth ubicado en la Alta Guajira ha reportado el creciente ingreso de personas afectadas por la desnutrición (especialmente de la población indígena), ente ellos 20 niños, encendiendo las alarmas de los organismos de socorro.
El asesor de la Gobernación de la Guajira, Wilson Rojas, dijo a medios locales que aunque las toneladas de provisiones llevadas a la zona por la Unidad de Gestión del Riesgo son de gran ayuda, no son suficientes teniendo en cuenta que la determinación de Venezuela parece definitiva.
El país vecino ha sido la principal fuente de abastecimiento de la comunidad que incluye a los municipios de Manaure, Maicao y Uribia, en donde ya se decretó la calamidad pública y se activó la sala de crisis permanente para agilizar las ayudas y las soluciones permanentes.
Entre tanto los colombianos han implementado estrategias como el canje de alimentos en pueblos aledaños pero en los últimos días incluso las tiendas de los pueblos se quedaron sin mercancía.