El francés Thomas Voeckler (Europcar) ganó la décima etapa del Tour ciclista de Francia, este miércoles entre Mâcon y Bellegarde-sur-Valserine, con 194,5 km de recorrido, mientras que el británico Bradley Winnigs (Sky) conserva la malla oro de líder.
En esta jornada de alta montaña, el pelotón tuvo que escalar el puerto del Grand-Colombier, primero de la prueba fuera de categoría.
Voeckler se distanció del pelotón en los últimos 1.500 metros de una fuga lanzada desde la primera hora de carrera.
El italiano Michele Scarponi, ganador del Giro 2011, se puso segundo a 3 segundos del francés, y por delante del alemán Jens Voigt.
Por su parte, el español Luis León Sanchez, quien se destacó en la escalada de la llegada, quedó cuarto en la meta, mientras que el belga Dries Devenyns, quinto, después de atacar en los último 3,5 Km para luego ceder.
Voeckler firmó la segunda victoria de etapa de un corredor francés desde la largada de esta "Grande Boucle", tres días después de que lo hiciera el benjamín del pelotón, Thibaut Pinot, el domingo, en la etapa con meta en Porrentruy (Suiza).
La posición de Wiggins no fue puesta en peligro a pesar de la diferencia de casi un minuto que le sacó el italiano Vincenzo Nibali en el descenso del Grand Colombier.
Nibali fue neutralizado antes de la cima del pequeño puerto de Richemond (3ª categoría), la última dificultad a 20 kilómetros de la llegada, gracias al trabajo de uno de los compañeros de escuadra de Wiggins, el australiano Richie Porte.
"Sabíamos lo que nos esperaba, En el Tour sé, desde que era niño, que al malla oro se le ataca. Sería triste que no lo hicieran. Esto hace parte de la grandeza del Tour. Al día siguiente de la jornada de descanso siempre es difícil, pero el equipo estuvo super-fuerte", dijo el inglés.
Después, en conferencia de prensa, ante las suspicacias que rodean siempre al ciclismo, con el caso del francés Rémy Di Grégorio candente, fue muy directo.
"No tengo para nada el sentimiento de tener que justificarme frente a todo el mundo. Si yo fuera un corredor de m..., que llegara de cualquier parte, pero tengo un palmarés, fui tres veces campeón olímpico en pista, fui cuarto en el Tour y tercero en la Vuelta (...) Si tengo este puesto en el Tour se debe a mucho esfuerzo, mucho trabajo. Merezco este puesto y por vestir la malla oro no debo justificarme", aseveró.
En las pendientes del gran puerto del periodo jurásico, Scarponi lideró junto a Sánchez, quien aumentó el ritmo, Voeckler y Devenyns.
Ninguno de los rivales de Wiggins, salvo tres aceleraciones realizadas por Van den Broeck, intentó atacar antes de llegar a la cima (a 1.501 m de altura), franqueada por Voeckler en primer lugar, por lo que ahora viste la malla con pintas de mejor escalador.
Ya en la parte baja del descenso del Richemond, Voigt se puso al frente de la carrera pero sin lograr aumentar la diferencia.
Voeckler, de 33 años de edad, logró su tercera victoria de etapa en el Tour, tras las conseguidas en Perpiñán en 2009 y en Luchon en 2010.
Malla oro durante veinte días (diez en 2004 y otros diez en 2011), el francés llegó a esta edición con dolores en una rodilla, que superó después de haber pensado incluso en abandonar la prueba en la que terminó cuarto en la clasificación general final en 2011.
"Sufría calambres en el momento en que clasifiqué como mejor escalador en la cima del Grand Colombier (...) Al final sufrí de manera extrma, sentía un dolor muy fuerte, pero me daba la impresión de que a los otros les ocurría lo mismo. Nos escupieron un poco antes de la largada del Tour. La mejor respuesta está sobre el terreno. ¿La malla a pintas? la llevo puesta e intentaré conservarla", destacó el vencedor en la jornada.
La undécima etapa, considerada la "reina de Los Alpes", se disputa el jueves sobre un recorrido de 148 kilómetros entre Albertville y La Toussuire-Les Sybelles.
Todas las dificultades están concentradas en un trazado muy complicado, que pasa por los puertos de la Madeleine, el Glandon (hasta la cima de la Croix de Fer), y el Mollard, exigiendo un descenso muy técnico para luego seguir hacia la estación de esquí de la Toussuire, adonde llegará la 'Grande Boucle' por segunda vez en su historia.
AFP