Terremoto en Nepal: tres días de luto por los 5.057 muertos | El Nuevo Siglo
Martes, 28 de Abril de 2015

El primer ministro nepalí, Sushil Koirala, decretó este martes tres días de luto oficial por las víctimas del terremoto de magnitud 7,8 que dejó más de 5.000 muertos el sábado.

"En memoria de los nepalíes, de los hermanos y hermanas extranjeros, de los ancianos y los niños que perdieron la vida en ese mortífero seísmo, hemos decidido observar tres días de luto nacional a partir de hoy", declaró en un discurso televisado. 

Koirala aprovechó su intervención para darle las gracias a los donantes que brindan su apoyo a Nepal. 

El número de muertos por el terremoto en Nepalalcanzó 5.057 personas, anunció este martes la división de desastres naturales del ministerio del Interior.

Además hay más de 10.000 personas heridas por el temblor de magnitud 7,8 que el sábado sacudió Nepaly los países vecinos, indicó a la AFP el jefe de la división, Rameshwor Dangal.

Familias enteras se agolpaban en buses, algunas personas incluso viajaban en el techo de los atestados vehículos. Muchos habitantes también emprendieron el viaje para llegar a sus pueblos natales y determinar la magnitud del desastre allí. 

Este éxodo comienza en un momento en que los equipos internacionales con perros entrenados, maquinaria pesada para remover los escombros y provisiones lograron aterrizar en el país.

"Ahora mismo, es importante prevenir otro desastre tomando las precauciones adecuadas contra las epidemias", dijo a la prensa el portavoz del ejército, Arun Neupane.

Ante el miedo de la falta de provisiones, la gente también se agolpaba en las tiendas y en las estaciones de gasolina. 

La cifra de fallecidos por el terremoto en Nepal subió a 4.200, lo que convierte al sismo en el más mortífero de los últimos 80 años. Además 6.509 personas resultaron heridas. 

En India y China murieron 90 personas. 

Elisabeth Byrs, portavoz del Programa Mundial de Alimentos (PMA) dijo que la agencia "lanzaría un programa a gran escala" a partir del martes. 

En el barrio de Balaju, un hombre se enfrentó al dolor de perder a su hija. 

"Ella era todo para mí. No hizo nada malo, ella no tendría que haber muerto", dijo Dayaram Mohat, padre de una adolescente de 14 años, que fue sacada de los escombros por la policía utilizando una grúa, martillos e incluso cavando con las manos. 

"Necesitamos más equipamiento para poder detectar sonidos y localizar a supervivientes", dijo el coronel Naresh Subba.

El temblor también desató un alud en el Everest, donde se confirmaron dieciocho muertes. Allí se encontraban al menos 800 personas, incluidos muchos extranjeros, según las estimaciones de responsables locales. 

Este lunes, los helicópteros de rescate lograron rescatar a montañistas que se encontraban de varados, después de una primera operación para evacuar los heridos. 

 

-250 desaparecidos en alud cerca del epicentro del sismo

Alrededor de 250 personas podrían estar desaparecidas después de que el martes un alud arrasara un área de Nepal muy popular para hacer senderismo, cerca del epicentro del devastador terremoto, anunció un responsable local. 

"Se produjo un alud en la tarde de hoy (martes) en Ghodatabela, un área situada en la popular ruta de senderismo de Langtang", dijo el responsable, Uddav Prasad Bhattarai.

"Es difícil decir cuántos están desaparecidos, pero podrían ser 250 según una primera estimación", agregó.

El responsable dijo que podría haber turistas extranjeros entre las personas desaparecidas en esta zona, de difícil acceso y donde las comunicaciones son complicadas. 

Las operaciones de socorro habían comenzado pero se estaban desarrollando con dificultades por el mal tiempo, explicó Bhattarai. 

 

- 'Hay mucho miedo y confusión' -

 

Miles de personas que perdieron sus hogares pasaron la noche en el exterior, en tiendas de campaña. El suelo todavía tiembla de vez en cuando y muchos no han pegado ojo en toda la noche, mientras trataban de protegerse de la fuerte lluvia bajo unos plásticos. 

"Esto es una pesadilla. ¿Por qué no terminan las réplicas?", se preguntó Sanu Ranjitkar, un mujer de 70 años que se aferraba a su perro y respiraba con la ayuda de una máscara de oxígeno.

Envueltos en sábanas de plástico, muchos habitantes de Katmandú estaba desesperados por conseguir ayuda e información. 

"Hay mucho miedo y confusión", comentó Bijai Sreshth mientras intentaba escuchar por la radio algún mensaje del gobierno. "No sabemos qué va a pasar con nosotros ni el tiempo que vamos a pasar aquí", lamenta este padre de tres hijos, que se refugió junto a ellos, su esposa y su madre en un parque. 

El portavoz del ministerio nepalí de Interior, Laxmi Prasad Dhakal, avisó que el país necesita helicópteros para las operaciones de socorro en las zonas rurales, así como agua potable y víveres para los supervivientes. 

Los hospitales están desbordados y los médicos, movilizados las 24 horas, trabajan en condiciones muy precarias. Los depósitos de cadáveres están saturados.  

Los socorristas nepalíes reciben de a poco el refuerzo de cientos de activistas humanitarios llegados de países como China, India o Estados Unidos. 

Unos 70 estadounidenses viajarán a Nepal y Washington anunció que desbloquearía 1 millón de dólares para ayudar al país. 

Londres anunció por su parte una ayuda de 5 millones de libras, Canadá 5 millones de dólares y la Unión Europea 3 millones de euros. 

Esta ayuda debería servir para financiar tanques de agua potable, medicamentos y refugios provisionales. India envió 13 aviones militares cargados de toneladas de alimentos y de cubiertas de lona.

Los esfuerzos de reconstrucción podrían ascender a 5.000 millones de dólares, que representan al 20% del PIB del país, según los cálculos de Rajiv Biswas, economista jefe de la zona de Asia y el Pacífico de la consultora Asia IHS.

Nepal, como toda la región del Himalaya, donde se encuentran las placas tectónicas india y euroasiática, es una región de fuerte actividad sísmica.

En agosto de 1988, un sismo de magnitud 6,8 dejó 721 muertos en el este de Nepal. En 1934, un terremoto de magnitud 8,1 acabó con la vida de 10.700 personas en Nepal e India.