Chile enfrenta "un terremoto demográfico", advirtió  el presidente Sebastián Piñera, quien lo atribuyó a una sostenida baja en la tasa de fecundidad a la par de un mayor envejecimiento de la población.

"Hay toda una política que estamos aplicando para no cerrar los ojos ante este terremoto demográfico que estamos enfrentando", dijo Piñera, al explicar una serie de medidas de fomento de la natalidad que su gobierno está adoptando.

"A mí me preocupa mucho más éste terremoto que el terremoto del 27 de Febrero" de 2010 en Chile, que dejó más de 500 muertos y pérdidas por unas 30.000 millones de dólares.

Según los datos del Gobierno, si en el año 1990 la tasa de fecundidad en Chile era 2,6 hijos por mujer, la cifra hoy alcanza  1,8 hijos, por debajo de la tasa de recambio poblacional.

Según Piñera, hoy hay en Chile un millón de niños menos que en la década de los noventa, al tiempo que se ha duplicado el número de adultos mayores de 60 años.

"Sabemos que es un fenómeno universal, pero en Chile se anticipó y se precipitó" el envejecimiento de la población, dijo el mandatario.

Entre las 21 medidas mencionadas por Piñera para fomentar la natalidad, algunas de las cuales ya están en curso y otras se pretenden adoptar en los próximos meses, se destaca el anuncio de un bono de 200 dólares a las madres que engendren un tercer hijo.

Su propuesta ha levantado polémica, por lo insuficiente del monto.

"El bono por el tercer hijo es un reconocimiento que no pretende sustentar los costos y los gastos que significa un hijo", se justificó Piñera.

El mandatario anunció además que duplicará el número de tratamientos contra la infertilidad en los servicios de salud pública, hasta alcanzar las 2.000 atenciones anuales.

Desaceleración económica

De otra parte dijo que es evidente" que la economía chilena atraviesa por una desaceleración y  explicó el fenómeno por un clima de incertidumbre generado por la campaña política para las elecciones de noviembre.

"Es evidente que estamos teniendo una desaceleración con respecto a lo que traíamos", afirmó Piñera en un encuentro este jueves con periodistas.

"Estamos notando una cierta desaceleración de la inversión. Todavía no tenemos las cifras, pero sí algunos indicadores como una baja de los proyectos de inversión de 24.000 a 20.000 millones de dólares", explicó el mandatario.

La inversión, junto a la demanda externa, había sido el motor del crecimiento de la economía chilena.

"Creo que la estabilidad, la confianza, la certidumbre, el tener reglas del juego claras, es algo muy necesario para fomentar la inversión. Cualquier asomo de incertidumbre y de inestabilidad, de reglas no claras, de propuestas que cambian las cosas, sin tener certezas en su alcance y magnitud y contenido, genera una clima de mayor incertidumbre", dijo Piñera.

Más temprano, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, apuntó directamente a las propuestas de reforma tributaria y cambio de Constitución que ha formulado -aún sin entregar detalles- la exmandataria socialista y candidata presidencial Michelle Bachelet, favorita para los comicios.

Por otro lado, el mandatario advirtió que el Presupuesto de la Nación de 2013, de 63.000 millones de dólares, se verá afectado por una reducción de 2.000 millones de dólares en el aporte de la estatal minera Codelco, la mayor productora de cobre.

Codelco, que entrega todos sus beneficios al fisco chileno, registró una caída de sus excedentes en el primer trimestre de un 43%, principalmente por una caída del precio internacional del metal.

En 2012 la economía chilena creció 5,6%, impulsada por todas las áreas de la economía, salvo el sector agropecuario y silvícola.

Para este año, la estimación del Banco Central sitúa el crecimiento del PIB en un rango entre 4,5 y 5,5%./AFP