Las bellas tenistas María Sharapova y Ana Ivanovic se enfrentarán esta noche en un espectáculo sin precedentes para el público bogotano, que por primera vez podrá observar en vivo y en directo a dos ex número 1 del circuito femenino, tal y como sucedió hace un año con las hermanas Venus y Serena Williams, esta última actual poseedora del primer lugar. Las tenistas no se encuentran desde el torneo de Indian Wells en 2012, cuando la rusa avanzó a la final después de que Ivanovic se retiró por una lesión de cadera.
Además de sus grandes logros en el tenis, donde ha ganado los cuatro Grand Slams y ganancias por más de 16 millones de dólares, María Sharapova ha sido distinguida como una de las 50 celebridades más bellas, según la revista People, y es la deportista con más visitas en Google y Youtube.
La rusa es conocida por la potencia en sus servicios, aunque diversos problemas en el hombro derecho han disminuido su potencia a través de los años. Su juego es basado en la potencia y el despliegue físico y por eso se adapta mejor a las superficies rápidas. En cambio, no le gustan para nada las canchas de arcilla, incluso declaró alguna vez que se consideraba una “vaca en el hielo” en una cancha de arcilla.
Además de sus múltiples contratos de publicidad y modelaje, que incluyen haber posado en la prestigiosa revista Sports Illustrated, Sharapova incursionó recientemente en el negocio de los dulces con “Sugarpova”, su propia marca de caramelos. Radicada en La Florida, Sharapova es también embajadora de las Naciones Unidas enfocada en el Programa de Recuperación tras el desastre nuclear en Chernobyl (Ucrania).
Por su parte, la serbia Ana Ivanovic es también modelo además de tenista, ha ganado el Roland Garros y ha sido finalista del Abierto de Australia, además de otros siete títulos WTA y cinco de la ITF. Sus ganancias superan los ocho millones de dólares.
Ivanovic se destacó porque a los 18 años de edad ya había vencido a jugadoras establecidas como Svetlana Kuznetsova, Nadia Petrova, Vera Zvonareva y Amélie Mauresmo, a quien derrotó en el Roland Garros de 2005. De hecho, Petrova alguna vez describió su estilo agresivo y su impresionante revés como “lo mejor que hay”.
Sin embargo, Ivanovic ha decaído en su juego desde su victoria en Roland Garros de 2008. Desde entonces, no figuraba en un Grand Slam hasta 2012, cuando llegó a cuartos de final del Abierto de Estados Unidos, en el que perdió con Serena Williams, eventual campeona. Esta baja en la forma ha sido atribuida a su falta de confianza. Esto ha llevado a que incluso la legendaria Martina Navratilova declarara en el Abierto de Australia 2010 sobre ella que “Aunque no tiene absolutamente nada de confianza en sí misma, ella aún pelea hasta el último punto”. Esto motivó a que Ivanovic cambiara de entrenador y mejorara ligeramente su consistencia.
Conocidos son también los desencuentros entre Ivanovic y su compatriota Jelena Jankovic, quienes siempre han mantenido una rivalidad desde que se enfrentaban en torneos infantiles en Serbia. De hecho, la gran victoria de Ivanovic en la final de Roland Garros fue a expensas de su rival, tras recuperarse de un 3-1 en el último set. Ambas han admitido en ocasiones no llevarse bien, lo cual quedó claro en el Abierto de Madrid de 2010, cuando Jankovic fue pillada imitando un gesto característico de Ivanovic de levantar el puño hacia su madre. Luego Jankovic declaró que el gesto le parecía “irritante”, aunque más adelante mostró arrepentimiento y dijo que lo hizo en un momento de calentura.
Así las cosas, todo está servido para que desde las 6:30 p.m. los bogotanos disfruten de una pizca del mejor tenis del mundo. El partido tendrá además transmisión de televisión por el canal Versus de Claro.