Libertad de Paraguay venció 2 a 0 a Itagüí de Colombia este jueves en un partido de ida por los cuartos de final de la Copa Sudamericana 2013, disputado en el estadio Nicolás Leoz en Asunción.
Los goles para el conjunto gumarelo fueron anotados por el volante Osmar Molinas y el delantero Jorge Recalde, a los 38 y 44 minutos, respectivamente.
Fueron largos los minutos de angustia antes de que Libertad lograra romper el celofán ante un conjunto colombiano cerrado y hostil, fórmula con la que intentó contener los furibundos ataques del cuadro guaraní.
En el segundo tiempo, a los 58 minutos, el delantero colombiano Quiñonez estrelló en el palo una clara jugada de gol, que pudo haber descontado el tanteador final.
Ambos clubes volverán a verse las caras el próximo jueves para definir el pase a las semifinales.
El ganador de la llave enfrentará en semifinales al vencedor de la serie entre el Sao Paulo de Brasil y el colombiano Atlético Nacional, que el miércoles firmaron un 2-2 en campo del campeón defensor del torneo.
Hasta el primer gol, los visitantes buscaron con juego recio provocar la reacción de sus adversarios.
En el fondo, los espigados defensores centrales de las "Aguilas Doradas" de Colombia, López y Maturana, frustraron el sistema habitual de incursión del elenco gumarelo, el juego aéreo.
Pero el 'bombazo' de Molinas, que perforó la red del cuidavalla argentino del Itagüí, Osvaldo Cabral, cambió todos los planes a los 38 minutos.
Los liberteños gritaron su alegría después de frustrantes minutos que llenaron de nervios a sus delanteros y a su hinchada.
Al saber que golpeó a su rival, los paraguayos insistieron a través de proyecciones del defensa Moreira por la derecha y las subidas de Romero por el mismo sector.
El mediocampista Sergio Aquino en el medio movió como un eje a su equipo repartiendo pelotas por izquierda y derecha para los ataques de Brian Montenegro y Jorge Recalde.
Cuando ya parecía finalizar el primer tiempo con la mínima diferencia a favor, el delantero Recalde dominó un balón originado en un centro y aguantó, giró y pegó con potencia un derechazo en forma oblicua al arco de Cabral.
La pelota describió una dirección ovalada y se coló cerca del palo posterior, el derecho del portero. Fue un disparo en difícil posición y en medio de una nutrida defensa del cuadro adversario.
En condiciones muy complejas, el conjunto paraguayo consiguió el 2 a 0, un resultado que le sirve para acariciar la clasificación a semifinales de la Copa Sudamericana.
En el segundo tiempo, el equipo de Bernal hizo un vasto sacrificio para tratar de descontar.
Por momentos llegó, como lo hizo Quiñonez en un enfrentamiento frontal con el cuidavalla uruguayo de Libertad Rodrigo Muñoz, pero la pelota pegó en el palo, para mala suerte de su equipo.
Después de eso, todos los intentos del cuadro colombiano fueron vanos para alcanzar la red de Muñoz.
Los locales coparon todas sus líneas de defensa e intentaron el contragolpe con posibilidades ciertas de anotar./AFP