Con el hallazgo por el grupo forense de la Dijin de la Policía de otro cadáver, en el cerro de Monserrate, subió a nueve el número de mujeres que habrían sido asesinadas por Fredy Armando Valencia Vargas, el Monstruo de Monserrate.
Al respecto, el director de la Sijín en Bogotá, Coronel Javier Barrera, no descartó que se encuentren más cuerpos, victimas del Monstruo de Monserrate.
“En el día de ayer se encontraron cuatro restos óseos, el día lunes y uno el día sábado, para un total de 8 y lo que manifiesta el antropólogo forense es que el estudio de la pelvis indica que todos son mujeres“, dijo.
El funcionario aseguró que se espera terminar las diligencias judiciales hoy para descartar la posibilidad de que existan más restos humanos en la zona.
Por otra parte la directora seccional de Fiscalías de Bogotá Carmen Torres Malaver, aseguró que Valencia, se enfrenta a una pena de hasta 33 años de prisión.
“Por el primer cuerpo se le imputa a este señor el delito de homicidio agravado y él en su interrogatorio, nos cuenta de todos los demás hechos que ha cometido (…) Seguimos con las audiencias de medidas de aseguramiento, enfrentándose a una pena de 33 años de prisión” dijo.
El habitante de la calle fue capturado por las autoridades y su confesión estremeció por la frialdad con que reconoció los homicidios.
El detenido señaló a las autoridades que contactaba a las mujeres que en muchos casos eran habitantes del ‘Bronx’ en el centro de Bogotá, para conducirlas a su cambuche en la falda del Santuario.
“Yo les brindaba comida, ropa, las bañaba y les daba lo que les gustaba -psicoactivos-. Cuando ya estaban limpias yo les decía que me dieran lo mío -favores sexuales-, pero ya no querían darme nada, se querían ir y robarme cosas. Hasta me atacaban”, dijo Valencia.
“Las asfixiaba apretándoles el cuello. Era en defensa propia, porque ellas me atacaban para irse sin pagarme”, señaló.
El Instituto de Medicina Legal le practicará un examen psiquiátrico que hará parte del proceso judicial por el delito de homicidio. Este sujeto permanece detenido por la Policía Metropolitana y se espera que sea conducido a la cárcel Modelo, a la espera de su juicio.
Las víctimas del Monstruo de Monserrate eran mujeres habitantes de calle que tenían entre 18 y 22 años.
Por varios años utilizaba el mismo modus operandi para satisfacer sus deseos sexuales. No despertó sospechas, ya que las víctimas no eran reportadas como desaparecidas por su condición de habitantes de calle.
Todo se destapó hasta este fin de semana cuando la Policía, mientras hacía un operativo en Monserrate vio la actitud sospechosa de Fredy Valencia.
De acuerdo con el general Humberto Guatibonza, director de la Policía Metropolitana de Bogotá, el pasado sábado un grupo de uniformados patrullaba la zona y vio a Valencia con actitudes extrañas.
La actitud sospechosa llevó a realizar una requisa de rutina y fue en ese momento que hicieron el atroz hallazgo: en su poder encontraron unas bolsas negras, en las que había restos óseos.
Lo que ha logrado averiguar la Policía de este sujeto, es que tiene estudios universitarios de hasta cuarto semestre de ingeniería y por más de 10 años vivió en la localidad de Kennedy, hasta que abandonó su hogar y se convirtió en habitante de calle. Luego estableció su ‘cambuche’ en las inmediaciones de Monserrate.
Valencia, de 33 años de edad, fue cobijado con medida de aseguramiento consistente en detención preventiva en centro carcelario tras aceptar que es el responsable de la muerte de una mujer cuyo cadáver apareció en un predio sobre la falda del cerro Monserrate.
Además de este caso, al parecer está vinculado con las muertes de otras siete mujeres en similares circunstancias.
En interrogatorio rendido, luego de su captura realizada en la avenida Circunvalar con calle 20 de esta capital, Valencia manifestó que colaborará con las autoridades en la búsqueda de los otros cuerpos y de información relacionada con la identidad y procedencia de las víctimas.
En audiencia realizada ante el juzgado 52 Penal Municipal, con función de control de garantías, aceptó que había matado a la primera mujer hallada en el predio.