El seleccionador de fútbol Sub-20 de Irak, Hakkem Al Azzawi, quitó importancia este martes, víspera de la semifinal del Mundial de la categoría ante Uruguay en Trebisonda, a la acusación de que en su equipo hay jugadores que superan la edad autorizada.
"Yo también escuché que se habló algo parecido de otros equipos. No nos importa. Yo creo en mi equipo, me preocupo de jugar al fútbol y sólo de jugar al fútbol. No nos preocupan esas historias", declaró Al Azzawi en una rueda de prensa en el estadio donde tendrá lugar el duelo, negando credibilidad a la acusación, formulada por un periodista de su país.
"Estamos haciendo un gran Mundial, queremos seguir con eso", apuntó, señalando que únicamente se preocupa en este momento de cómo preparar el partido ante la Celeste y no de rumores de ese tipo.
La prensa uruguaya se ha hecho eco antes de la semifinal del miércoles de las acusaciones formuladas días antes por un periodista iraquí, Hussain Mubarak, sobre que el arquero Mohammed Hameed y el atacante Mohanad Abdulraheem tienen una edad superior a la declarada oficialmente para este torneo.
Según la denuncia de Mubarak, Hameed habría jugado con la selección Sub-23 iraquí en 2005. Si es cierta la fecha de nacimiento que figura oficialmente para la FIFA (24 de enero de 1993), en aquel año tenía apenas 12 años, por lo que el periodista deduce que se ha producido un fraude.
Respecto a Abdulraheem, afirma también que supera la edad permitida para jugar este torneo en Turquía.
El caso había saltado inicialmente en la prensa chilena, en el diario El Mercurio, porque su equipo nacional se enfrentó en la tercera jornada de la primera fase a Irak, con victoria de los asiáticos por 2-1.
Chile fue eliminado del Mundial Sub-20 el domingo en cuartos de final, al perder 4-3 tras la prolongación ante Ghana.
Irak, por su parte, está haciendo historia en este Mundial Sub-20 y ha conseguido alcanzar sus primeras semifinales en una competición de la FIFA.
Más allá de la polémica por este asunto, Al Azzawi destacó el potencial del equipo uruguayo, pero se mostró ilusionado en que sus muchachos puedan continuar la buena racha en Turquía y acceder a la final.
"Los equipo sudamericanos son de los más fuertes del mundo. Será un rival difícil, pero estamos trabajando para poder ganar este partido", afirmó.
"Tenemos mucha ilusión por conseguir un buen resultado y creo que podemos hacerlo. Lo vamos a intentar con todas las fuerzas, nos vamos a esforzar al máximo y vamos a dar el máximo para poder conseguirlo", sentenció.
El ganador del duelo entre iraquíes y uruguayos se enfrentará el sábado en la gran final al vencedor del Francia-Ghana.
AFP.