El español David Ferrer (N.5), gran baza del equipo español, venció por 6-3, 6-4 y 6-4 al checo Radek Stepanek (N.37), este viernes en el partido inaugural de la final de la 100ª Copa Davis de tenis, cuyo título defiende el equipo ibérico, que así se colocó 1-0 en el marcador.

A continuación, Nicolás Almagro (N.11) enfrenta al checo Tomas Berdych (N.6), el gran crédito de los anfitriones para lograr un título que ganó una vez la exChescoslovaquia en 1980, mientras que los españoles buscan su sexta 'ensaladera'.

En el sexto juego del primer set, el veterano checo, de casi 34 años, levantó tres bolas de break al alicantino y tras más de 25 minutos deshicieron la paridad para poner la manga 3-3, con golpes de muy alto nivel y echando mano un par de veces al 'ojo de halcón' para determinar si la bola había caído dentro o fuera de los flejes.

Pero, dos games después, en el octavo, Ferrer, de 30 años, demostró porqué es el quinto jugador mundial y logró la inflexión para colocarse 5-3 arriba y, con su servicio cerrarlo 6-3 después de 58 minutos de intensa brega.

Después, ya en la segunda manga, en un largo primer juego el español volvió a hacer el quiebre tras un excelente smash para ponerse con ventaja y por poco no logró repetir en el tercero.

No obstante, el checo, contra pronóstico de acuerdo al curso del partido logró el quiebre en el sexto juego y se puso 3-3, lo que hizo estallar las tribunas, demostrando el local que vendería cara la piel, apoyándose en su potente servicio sobre la superficie dura y ultrarrápida.

Pero, el talento de Ferrer quedó en evidencia en el noveno juego en que hizo un nuevo break y se puso 5-4, aunque luego perdería tres bolas de set con su saque, para cerrar con la cuarta por 6-4 después de que Stepanek intentara desviar la atención con gestos.

Así llegaron a la tercera manga, en la que el local parecía más cansado que el visitante, por lo que no extrañó que el de Jávea lograra el quiebre en el primer juego, eso sí, ayudado por la red que desvió su postrero disparo quedando la bola fuera del alcance de su adversario.

Después, el español logró un nuevo quiebre en el séptimo game, el de las grandes inflexiones.

Sin embargo, cuando todo estaba de su lado para sentenciar el encuentro, el checo se encontró con un break a su favor para ponerse 5-3 abajo, y 5-4 con su saque. Pero, el primero no dejó pasar su ocasión y cerró con 6-4 tras 2 horas y 58 minutos, logrando el primer punto para la Roja con su segunda bola de partido.

En el mano a mano entre ambos jugadores, el 'Pitbull' Ferrer ahora domina 7-3 a su derrotado de la jornada.