Soluciones al déficit habitacional | El Nuevo Siglo
Lunes, 17 de Febrero de 2014

En medio del crecimiento de los proyectos de vivienda en el país, van surgiendo propuestas para solucionar el déficit habitacional del país. Una de ellas es la que propone el arquitecto Jaime Sarmiento Ocampo, PhD de la Universidad Nacional de Medellín.

Una idea patentada en España desarrolla un modelo constructivo que podría convertirse para los colombianos en una opción más económica, rápida y fácil de construir vivienda, a propósito de los programas de interés social.

La propuesta de Sarmiento Ocampo se configura como una alternativa al déficit habitacional en el país, en donde carecen de vivienda, según el último censo del DANE (2005) alrededor de 3’828.000 hogares de un total de 10’570.000.

La diferencia entre este modelo constructivo y las conocidas viviendas prefabricadas, además de los materiales, es que son sismorresistentes, bioclimatizadas y autoarmables; y dado que los componentes pueden “confeccionarse” con residuos industriales, también son ecológicas.

“Es como un ‘lego’. Cada usuario podrá construirla como quiera y modificarla de acuerdo a sus necesidades”, dice el arquitecto.

La principal ventaja es que es un sistema adaptable.  “En arquitectura y construcción, las edificaciones son bastante rígidas. Sin embargo, este sistema permite armar diferentes volúmenes y formas, mediante unas piezas que son de industrias. Estas estructuras tienen que ver con elementos que se acomodan a las topografías y a las necesidades de los habitantes, por lo tanto son flexibles y no generan impactos negativos en el medio ambiente”.

Un beneficio adicional que contrasta con la necesidad de contratar personal de obra en otros tipos de construcciones es que estas viviendas pueden ser ensambladas por las personas que las van a habitar.

“Es más económico que un sistema tradicional, pues se ahorra un 80% de tiempo en su construcción; también hay ahorro en el transporte, pues los sistemas modulares como el de los contenedores obligan a tener camiones y grúas, lo cual implica un costo adicional”, explica Sarmiento.

Para su implementación no se requieren grandes cimentaciones, movimientos de tierra o excavaciones como en el modelo tradicional, por el contrario requiere apoyos mínimos. “Eso genera un ahorro significativo porque los módulos que nosotros utilizamos se posan sobre el terreno”.