Socios del descendido club de fútbol Independiente de Argentina arrojaron sillas y otros objetos contundentes para agredir al presidente, Javier Cantero, y forzaron la suspensión de una asamblea en su sede de Avellaneda, en la periferia sur bonaerense.
"¡Que se vayan todos, que no quede ni un solo!", cantaban a coro enfurecidos asociados que se presentaron en el salón de actos para repudiar a la comisión directiva encabezada por Cantero, según imágenes de la televisión.
Independiente, el 'Rey de Copas' con 16 títulos internacionales y uno de los gigantes del fútbol argentino, perdió la categoría por primera vez en la historia el 15 de junio pasado al caer 1-0 contra San Lorenzo y jugará la próxima temporada en la segunda división.
Los hinchas de los 'Diablos Rojos' culpan a Cantero por el descenso y le atribuyen un mal manejo del fútbol de la institución.
La asamblea de socios iba a considerar un alza en la cuota mensual para los socios y en momentos en que Cantero tomaba el micrófono empezaron a volar sillas y otros objetos sobre la mesa de la presidencia.
Cantero y el resto de los dirigentes alcanzaron a levantarse y salir por una puerta lateral en busca de refugio de la violencia que se desató en la frustrada asamblea.
La asamblea iba a sesionar solamente con socios autorizados mientras que grupos de fanáticos cortaron la calle frente a la sede y lanzaron pirotecnia en señal de protesta contra la dirigencia.
AFP.