Sobrecostos no hay en el sector inmobiliario | El Nuevo Siglo
Lunes, 5 de Diciembre de 2011

Contrario a la sensación de algunos analistas del mercado, en Colombia no hay un recalentamiento o sobrecostos en el sector inmobiliario, sino que el aumento de los precios es producto del crecimiento económico del país.


Así lo considera la Lonja de Propiedad Raíz de Bogotá al revelar que si bien el valor de las propiedades se ha incrementado de manera importante en los últimos años, actualmente se están estabilizando, contrario a la caída abrupta que caracteriza a las burbujas.  
La presidente de la Lonja de Bogotá, Amparo Araújo explicó que la dinámica en la economía y la llegada de nuevos capitales ha redundado en un interesante incremento en las licencias de construcción y en las obras como tal.


Según la Lonja de Bogotá, el crecimiento de los precios corresponde principalmente a la escasez de suelo urbanizable que se presenta en las principales ciudades, y por ende en el peso que tienen dentro del precio final de las viviendas. Esta situación, obedece a una falta de gestión para la generación de suelo urbanizable, convirtiéndose este en un verdadero tema a tener en cuenta, especialmente en momentos en que se realiza la revisión del POT en Bogotá. De acuerdo a cifras de la Lonja de Propiedad Raíz de Bogotá, dicha escasez de suelo, fue uno de los principales factores para que en 2010 el suelo se incrementara más de un 9% en algunas zonas de Bogotá.


Situaciones como Venezuela y la protección a inversiones ha hecho que en los últimos nueve años se haya registrado un mejor comportamiento en la construcción, con mayor auge entre 2010 y 2011, periodos que arrojaron crecimientos superiores  al gran apogeo de los noventa.


“Eso no se llama burbuja inmobiliaria sino mayor crecimiento económico y mayor necesidad de soluciones en finca raíz, factor que jalona el desarrollo”, apuntó Araujo.
La directiva expresó que el precio de los inmuebles en Bogotá ha reportado un leve crecimiento lo cual ratifica la rentabilidad y el buen negocio de tranzar con casas, edificios, bodegas, oficinas y locales para el comercio.


La situación, manifestó, se está volviendo atractiva para los inversionistas que están queriendo salvar sus capitales de la inestabilidad de la Zona Euro y de los vaivenes de la economía mundial. Destacó las ayudas vía subsidios por parte del Gobierno y resalto que a pesar de los recientes incrementos de las tasas por parte del Emisor, estas aún se encuentran en niveles altamente competitivos que favorecen que se mantenga el buen momento del sector.


Sobre la crisis en Europa, hay aspectos que empiezan a inquietar a los actores del mercado de la construcción y tienen que ver con pérdida de empleo y una caída en la inversión.
 “Aquí no hay indicios peligrosos, pero tenemos que seguir trabajando de la mano del ejecutivo y con ojo avizor. El asunto es crecer, ganar y evitar cualquier conato de crisis, pero por fortuna en Colombia se aprendió del pasado”.


Aseveró que por el TLC con Estados Unidos, el gran fenómeno detectado es un aumento importante en la demanda de lotes e inmuebles en los principales cascos urbanos y aclaró que no hay razón para pensar en mayores costos, aprovechando el mercado estadounidense sino en satisfacer a las empresas e inversionistas que desde ya están interesados por el mercado colombiano.


El TLC con EU, anotó la dirigente gremial, es un bálsamo, así como otras negociaciones venideras de Colombia con el exterior, porque cuando viene un auge en la economía, este trae consigo una cúspide en la finca raíz y con ello una estabilización y una buena rentabilidad en los precios. Actualmente esta mayor oferta se registra en bodegas y oficinas, no solo por el acuerdo comercial, sino porque el país aprendió de la crisis hipotecaria del 98 y ahora construye para vender.


Araujo consideró muy prudente vender lo que demandan los inversionistas para no poner inventario en venta y así mantener un valor real y rentable en los inmuebles por el lado de los arriendos. Como quien dice, en la nueva coyuntura es cuando más presente hay que tener la ley de la oferta y la demanda.