El juez primero promiscuo penal municipal de Soacha cobijó con medida de aseguramiento en establecimiento carcelario a 4 integrantes de una banda  que habría hurtado por lo menos 200 computadores y elementos escolares en 10 escuelas rurales de los departamentos de Cundinamarca y el Tolima.

El juez  consideró que sí son un peligro para la comunidad, más aun cuando se está afectando un derecho fundamental de los menores, como es el de la educación.

Ante el estrado respondieron Álvaro Galán Restrepo, José William Castañeda Ávila , Oscar Uriel Gómez Ospina y Jorge Hernán Guzmán, quienes aceptaron los delitos de  concierto para delinquir en concurso homogéneo y heterogéneo con hurto calificado y agravado.

Indicó el fiscal del caso que los cuatro imputados son responsables del hurto continuado en zonas rurales de loa municipios de Guaduas, Sasaima ,Albán, La Peña, Quebradanegra, Útica, Villeta, Chaguaní, en Cundinamarca, y Natagaima, en Tolima. Entraban a las escuelas y se llevaban computadores, videobin y tlevisores  que recibían la ayuda del programa Nacional Computadores para Educar.

Según los cálculos, las pérdidas ocasionadas por el accionar de la banda éstas podrían llegar a más de 500 millones de pesos.

Dos de los cuatro imputados fueron capturados en vía pública, mientras que otros dos fueron privados de la libertad mediante allanamiento a las viviendas donde residían, en un sector de la localidad de Kennedy, al suroccidente de Bogotá.

La banda era conocida como Los Pescadores, ya que cada vez que se dirigían a cometer los ilícitos, comentaban a sus amistades que salían de pesca.

Al final de la audiencia el juez los envió a la cárcel Nacional Modelo de la capital del país.