Un parte de tranquilidad fue el entregado por la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) luego de que la Administración Distrital confirmara el ingreso de 1.6 millones de pares de zapatos chinos a Bogotá por menos de un dólar.
El vicepresidente de Comercio Exterior y Vehículos de la entidad, Eduardo Visbal, aclaró que “no es una cifra importante y si es a ese precio, es porque es gente de menores recursos”.
Indicó que dichos productos son chancletas y que no representan ninguna amenaza para los productores locales, pues “eso no es nada comparado con el volumen de consumo de zapatos, en importaciones el año pasado llegó a 130 millones de pares de zapatos y esto es el 1%”.
Reconoció que en los últimos diez años el consumo per cápita ha aumentado y se ha multiplicado por cuatro, “por eso, la demanda por calzado y ropa ha crecido, eso incluye que además hay más moda”.
Sugerencias
El parte de tranquilidad incluyó una sugerencia y es que “la industria tiene que preocuparse en evolucionar y producir más. Más moda y mejor calidad; es que calidad hay, pero falta más producción”.
Sucede que la industria nacional no está afectada por razones externas, sino por razones propias, añadió.
Sus comentarios, entregados a EL NUEVO SIGLO, hacen referencia a la última nota editorial del Observatorio de Desarrollo Económico de Bogotá que evidenció “la difícil situación que afronta el sector del calzado por cuenta de la competencia china”.
En tan solo cuatro años, se lee en el documento divulgado que el volumen de zapatos proveniente de dicho país se cuadruplicó, al pasar de 3,6 a 14,4 millones de pares entre 2008 y 2012.
“Este crecimiento récord, sustentado en precios en promedio 50% por debajo de los del resto del mundo, se traduce a su vez en un incremento de la participación del gigante asiático como proveedor de zapatos en Bogotá”, agrega.
Hoy, de cada 100 pares de zapatos importados que llegan a Bogotá, 75 provienen de dicho país aclaró la Administración Distrital.
Preocupación
Al respecto, Carlos Simancas, Secretario Distrital de Desarrollo Económico reconoce que se trata de “una consecuencia del proceso de globalización y de la posición dominante de China en el comercio mundial de manufacturas”. Sin embargo, advierte que “una parte significativa del calzado importado desde China llega al país de forma irregular”.
En detalle, la nota editorial señala que a la ciudad llegaron 1.604.103 pares de zapatos en 2012 desde el país asiático, por un valor inferior a un dólar por par, y más de 2.700.000 pares se registraron a menos de dos dólares.
Finalmente, el análisis de las cifras sugiere que en Bogotá ha sido más alto el impacto de este tipo de importaciones que en el resto del país. Mientras que en 2008, 29% del valor de las importaciones colombianas de calzado proveniente de la China tenía como destino la capital colombiana, en 2012 esta cifra creció a 39%.
De otro lado, la directora Ejecutiva de la Cámara Colombiana de Confecciones, Carolina Blackburn, hizo un llamado al Gobierno ante la posibilidad de una reforma arancelaria para que considere la decisión de establecer un solo arancel de 5 dólares por kilogramo bruto.
“Haría que esa reforma arancelaria pierda total eficacia para atacar los problemas del sector, esa es nuestra preocupación”, dijo.