Desde hace 63 años, cuando el alcalde de Bogotá era Roberto Salazar Gómez, se vienen realizando estudios para la construcción de un Metro para la ciudad, el más reciente fue el realizado por la administración de Enrique Peñalosa, por el cual la Contraloría Distrital llamó a juicio fiscal al Mandatario del Distrito Capital.
En la citación del organismo de control también fue incluido el gerente de la Empresa Metro S.A., Andrés de Jesús Escobar, por la posible pérdida de $146.510 millones del erario, debido a la presunta irregularidad en la implementación de los estudios y diseños de la primera línea del Metro de Bogotá.
De acuerdo con el contralor de Bogotá, Juan Carlos Granados, la decisión obedece a la preocupación del Organismo de Control sobre la inutilización o utilización parcial de dichos estudios y diseños que desde el 2015 cuentan con la aprobación del Confis, el aval del Banco Mundial y la actualización de la Universidad de Los Andes y la Universidad Nacional de Colombia.
De otro lado, existe la preocupación en torno a la fecha límite que dio el Gobierno nacional al Distrito para la suscripción del convenio en el que la Nación financiará el 70% del costo de la obra, cuyo vencimiento es el 11 de noviembre. Lo importante para la Contraloría de Bogotá es la iniciación de la obra con la mayor calidad y el menor costo posible.
Los servidores públicos llamados a investigación, tendrán todas las garantías de carácter técnico y jurídico que establece la ley para este procedimiento, y sus explicaciones servirán al Organismo de Control para determinar si sus acciones u omisiones obedecen a decisiones de mayor eficiencia y eficacia en la utilización de los recursos públicos.
Peñalosa se defiende
El alcalde Mayor, Enrique Peñalosa, dijo que con los estudios que dejó la administración de Gustavo Petro no se podía realizar ninguna obra del Metro en este sentido y el compromiso de la administración actual es hacer un Metro para la ciudad y “lo estamos cumpliendo”.
Dijo que no entiende el proceso de responsabilidad fiscal que le fue abierto junto con el Gerente de la Empresa Metro.
Según el Alcalde, los estudios encontrados por su administración estaban incompletos y había que hacer nuevos análisis para que la ciudad tuviera un sistema de transporte masivo de acuerdo con las posibilidades no solo técnicas sino financieras.
En declaraciones hace unas semanas a EL NUEVO SIGLO, el Mandatario de los capitalinos señaló sobre el Metro que “cuando nosotros llegamos no había Metro, aquí lo que había era ruido de Metro, pero no había Metro, lo que había de diseños no era viable de ninguna manera, y tocó hacer un proyecto que fuera viable financieramente. Ahora este es un proyecto que está asegurado con recursos de la Nación y el Distrito, un proyecto que vamos abrir licitación a finales de este año, comienzos del año próximo, y todas estas son obras gigantescas que se van hacer por toda Bogotá”.
Descarte del estudio
El hecho es que la administración de Peñalosa desechó los estudios realizados por su predecesor, Gustavo Petro.
En 2013, a partir del diseño conceptual realizado, el Consorcio L1, integrado por Euroestudios SL, Idom Ingeniería y Consultoría S.A., y Cano Jiménez Estudios S.A., adelantó el “Diseño para la Primera Línea del Metro en el marco del Sistema Integrado de Transporte Público para la ciudad de Bogotá”, que propuso para la ciudad una línea subterránea hasta la calle 127, con una modificación en el trazado.
El costo de esta línea se estimó en $14,89 billones, cuando el euro estaba en $2.557,12 y el dólar en $1.997.
En el año 2015, por solicitud del Gobierno nacional, la Financiera de Desarrollo Nacional realizó un estudio de Ingeniería de Valor que identificó 49 opciones para optimizar el proyecto, con ahorros considerables, sin afectar su calidad.
En el año 2016, la devaluación del peso, los riesgos de la construcción bajo tierra, los cronogramas de obra y la incertidumbre por los costos de financiación condujeron al Gobierno nacional y distrital a realizar un estudio de alternativas para definir el proyecto más conveniente para la ciudad y concluyó con la propuesta de un Metro elevado.
Según la administración de Peñalosa, la propuesta del Metro bajo tierra resultaba inviable a la hora de construir obras subterráneas, lentas y costosas por la calidad de los suelos y las redes de servicios públicos desconocidas.
“Según el Alcalde, los estudios encontrados por su administración estaban incompletos y había que hacer nuevos análisis”
A partir de esta realidad, Gobierno nacional y distrital adelantaron un estudio de alternativas y comparación de costos entre la opción de Metro bajo tierra y en viaducto, que hasta la fecha no se había realizado, para tomar la decisión menos riesgosa y más conveniente para llevar a cabo el megaproyecto con el presupuesto existente $13,8 billones.
Jugada política
Uno de los temores que despierta la decisión del Contralor Distrital de abrir juicio fiscal contra el alcalde Peñalosa y el gerente de la Empres Metro, Andrés Escobar, es que sea una jugada política.
El experto en movilidad Fernando Rojas, dijo que tiene el temor de que esta sea una jugada política en época preelectoral. Dijo que no hay un acuerdo de hacer un Metro elevado como lo propone el alcalde Peñalosa.
Desde el Concejo de la ciudad el concejal del Polo Democrático, Manuel Sarmiento, calificó como un desperdicio la realización de nuevos estudios para la construcción del Metro. "Porque el alcalde Peñalosa de una manera irresponsable botó a la basura unos estudios avanzados para la construcción del Metro subterráneo y terminó dilatando todo el proceso. Todo parece indicar que este año tampoco se va abrir la licitación", dijo.
La concejala de la Alianza Verde, Lucía Bastidas, manifestó que la Contraloría de Bogotá debe evaluar las razones por las que no se utilizaron en su totalidad los estudios que había avalado el Banco Mundial. "Que el Metro siga para adelante, nada lo va parar. Los estudios son para tomar decisiones, no definitivas. Más caro sería hacer un Metro que quede parado a mitad de camino porque no había recursos y el Metro bajo tierra no tenía estudios de detalle".
La concejala del Movimiento MIRA, Gloria Stella Díaz, dijo que "los ciudadanos no podemos seguir metiéndonos la mano en el bolsillo para pagar estudios y hacer de la construcción de un Metro en Bogotá el caballito para llegar a la Alcaldía y luego ni Metro, ni recursos ni nada".
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