"Sin glifosato, Colombia nadará en cocaína" | El Nuevo Siglo
Martes, 5 de Mayo de 2015

La Procuraduría General de la Nación citó un reporte de la Oficina de Política Nacional para el Control de Drogas de la Casa Blanca que el aumento del 39% en los cultivos de coca en nuestro país durante 2014.

 

El aumento de los cultivos ilícitos, resultado de la falta de voluntad política gubernamental, se traduce en mayor control territorial por parte  de las organizaciones dedicadas al narcotráfico. La semana anterior, el cabecilla del grupo terrorista y narcotraficante FARC Milton de Jesús Toncel, alias “Joaquín Gómez”, pidió al Gobierno Nacional que “el acuerdo parcial de La Habana en esta materia tome inmediata aplicación en el territorio nacional”.

 

1. El reporte sobre cultivos ilícitos de coca en Colombia para el año 2014 de la Oficina de la Política Nacional para el Control de Drogas de los Estados Unidos (CNC) da la razón a alerta emitida por la Procuraduría General de la Nación respecto a prohibir la aspersión con glifosato y ratifica el desmonte subrepticio que el Gobierno Nacional ha hecho durante los últimos años de la política contra los cultivos ilícitos.

2. El informe señala que el aumento en los cultivos de coca es de 39%, un crecimiento sin antecedente en los últimos 10 años y solo comparable al que se experimentó en la época de los diálogos de El Caguán. Las hectáreas de coca pasaron de 85.000 a 112.000. La producción se incrementó en 30%.

3. El aumento de los cultivos, resultado de la falta de voluntad política gubernamental, se traduce en mayor control territorial por parte de las organizaciones dedicadas al narcotráfico, como las FARC, mayor ingreso de recursos para la comisión de crímenes y en el debilitamiento del estado de derecho.

4. La Procuraduría advirtió públicamente desde el segundo semestre de 2014 sobre el desmantelamiento de la política contra los cultivos ilícitos.

5. Ese desmantelamiento explica el inusitado crecimiento de los cultivos ilícitos. De acuerdo a los datos oficiales del propio Ministerio de Defensa, si se suman aspersión y erradicación de 2006 a 2009 se afectaron 827.838 hectáreas, mientras que de 2010 a 2013 el resultado fue apenas de 484.574. Se dejaron de eliminar 343.264. En promedio cada año el Gobierno Nacional dejó de eliminar 85.816 hectáreas por año, durante cuatro años. La caída en resultados es de 41.4%.

6. El informe del Ministerio de Defensa señala que en 2014 se asperjaron 55.532 hectáreas de cultivos, mientras que en 2012 el número fue cerca del 45% más: 100.678 hectáreas. Colombia llegó a un pico de 153.000 en 2007, casi tres veces más.

7. La caída en la erradicación demuestra la falta de voluntad del Gobierno Nacional. La meta de erradicación manual fijada para 2014 fue tan solo de 8.250 hectáreas de cultivos ilícitos en todo el territorio nacional, el 37.2% de lo erradicado en 2013, que corresponde a cerca del 10% del total de 80.500 hectáreas detectadas por el CNC en ese año. Al final en 2014 se erradicaron 11.702 hectáreas, casi menos que la mitad de 2013 y únicamente el 38% de lo erradicado en 2012. Es inexplicable que en 2008 se hayan logrado erradicar manualmente 95.731 hectáreas y en 2014 ocho veces menos. Esos resultados negativos tienen relación directa con el aumento de los cultivos ilícitos.

8. El desmantelamiento de la política contra cultivos ilícitos estimula el cultivo de coca en Colombia. El informe del Gobierno de los Estados Unidos señala que el 52% de los cultivos son nuevos. 

9. El Ministro de Justicia Yesid Reyes dio razón a la Procuraduría. En entrevista radial dijo que “no se está reconociendo que haya certeza científica sobre la nocividad del glifosato” y que se trata del cumplimiento del principio de precaución establecido por la Corte Constitucional. Omite el Ministro que se puede cumplir dicho principio sin necesidad de prohibir la aspersión con glifosato.

10. La prohibición de aspersión con glifosato tiene un efecto negativo para el medio ambiente y para la lucha contra el narcotráfico. Como lo había advertido la Procuraduría, en zonas donde se prohibió la aspersión crecieron exponencialmente las áreas cultivadas, como en el Putumayo y Nariño, frontera con Ecuador, y en el Catatumbo, frontera con Venezuela, ambas zonas de fuerte influencia de las FARC. Para extender los cultivos se devasta la selva.

11. Es el golpe de gracia a la política que buscaba eliminar los cultivos ilícitos la decisión, al parecer acogida por el presidente de la República, Juan Manuel Santos, de prohibir la aspersión con glifosato. Esa determinación satisface una de las 28 salvedades impuestas por las FARC para firmar el Acuerdo de Terminación del Conflicto Armado y es una medida de “desescalamiento” disfrazada.

La semana anterior, el cabecilla del grupo terrorista y narcotraficante FARC Milton de Jesús Toncel, alias “Joaquín Gómez”, pidió públicamente al Gobierno Nacional que “el acuerdo parcial de La Habana en esta materia tome inmediata aplicación en el territorio nacional”.

12. Si el Consejo Nacional de Estupefacientes adopta la prohibición de asperjar se pondría a Colombia a “nadar” en cocaína y sería el desmonte total de la lucha contra ese eslabón de producción y comercialización de la cadena del narcotráfico.