El representante Iván Cepeda, del Polo Democrático, le pidió al Gobierno Nacional implementar mayores controles de seguridad para evitar que los graves problemas de hacinamiento carcelario, que en muchos casos llega casi al 500 por ciento, pongan en riesgo el próximo proceso electoral.
Cepeda puso de presente el tema de la salud y dijo que es preocupante la situación porque los internos no cuentan con la atención requerida: “Es complicado no tener políticas para atender la población carcelaria enferma, especialmente de aquella en estado terminal. En otros casos ni siquiera hay agua potable”.
El viceministro de Justicia, Pablo Felipe Robledo, aseguró que desafortunadamente en Colombia hay un atraso en el sistema penitenciario de al menos 40 años y explicó que solamente en la última década se reanudo la construcción de nuevos centros de reclusión de alta seguridad.
Robledo sostuvo que se deben crear 26.000 nuevos cupos carcelarios para superar la actual situación de hacinamiento, cercana al 30 por ciento. Además, dijo que se cuenta para ello con un presupuesto de 60.000 millones de pesos, el cual no obstante resulta “insuficiente”.
El funcionario agregó que con la reapertura del Ministerio de Justicia se contará con un viceministerio exclusivo para atender la política criminal y carcelaria.
El director del Inpec, general Gustavo Adolfo Ricaurte, aceptó la problemática que se vive en el sistema penitenciario, en el que los inconvenientes principales son los temas de salud, educación, alimentación y seguridad. Así mismo, el oficial aseguró que el presupuesto que para atender dichas necesidades siempre es insuficiente.
La semana pasada, la Cámara creó una comisión de seguimiento de la situación carcelaria, la cual será integrada por seis representantes, quienes, junto con el Inpec y el Ministerio de Justicia, monitorearán las medidas para atender los graves problemas de la población reclusa.