Un avión de transporte militar ucraniano IL-76 fue derribado por insurgentes prorrusos en Lugansk, este de Ucrania, y varias personas perecieron, anunció este sábado el Ministerio ucraniano de Defensa.

"Los terroristas dispararon cínicamente y a traición con una ametralladora de grueso calibre y alcanzaron al avión IL-76 del Ejército ucraniano que transportaba tropas de rotación y estaba a punto de aterrizar en el aeropuerto de Lugansk", indicó el Ministerio en un comunicado.

El avión fue derribado después de que el gobierno ucraniano anunciara el viernes que había retomado el control del puerto de Mariupol, en el mar de Azov, región de Donetsk.

El Ministerio presentó su pésame a las familias "de los soldados muertos" cuyo número no precisó.

Lugansk es la capital de una de las dos regiones del este de Ucrania que ha proclamado su independencia.

Desde hace dos meses, el ejército lleva a cabo en el este de Ucrania una operación "antiterrorista" que hasta ahora había dejado al menos 270 muertos.

Los occidentales acusaron a Moscú de apoyar encubiertamente a la insurrección armada prorrusa en el este ucraniano suministrándole armas.

Estados Unidos acusó a Rusia de haber entregado a los rebeldes separatistas tanques y lanzacohetes, material que cruzó la frontera con Ucrania en los últimos días.

"Creemos que separatistas en el este de Ucrania adquirieron armas pesadas y equipamiento militar a Rusia, entre los cuales tanques y lanzacohetes rusos", afirmó en un comunicado la portavoz del Departamento de Estado, Marie Harf.

Ucrania afirmó el jueves que tres tanques rusos habían cruzado la frontera. La diplomacia estadounidense mencionó estas acusaciones y se refirió a "videos en internet que muestran este mismo tipo de tanques abandonando el suroeste de Rusia hacia varias ciudades del este de Ucrania".

"Rusia va a responder que estos tanques fueron tomados a las fuerzas ucranianas pero ninguna unidad de tanques ucranianos opera en esta zona. Estamos convencidos de que estos tanques vienen de Rusia", señaló Harf.

El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, afirmó el viernes que guardias fronterizos rusos interceptaron dos blindados ucranianos, que habían franqueado la frontera con Rusia, frente a las acusaciones en sentido inverso de Kiev.

Según Dimitri Peskov, citado por agencias, los guardias fronterizos interceptaron dos blindados que habían entrado en territorio ruso el viernes.

El presidente ruso, Vladimir Putin, "ordenó al ministerio de Relaciones Exteriores que informe a su homólogo ucraniano de la violación de la frontera por militares ucranianos", declaró el portavoz.

Por su lado, el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, se declaró preocupado por las informaciones según las cuales los grupos prorrusos en Ucrania se equipan "con armas pesadas provenientes de Rusia, incluyendo tanques".

El presidente de la Comisión Europea, el portugués José Manuel Barroso, pidió por su parte al presidente ruso Vladimir Putin que frene la entrada a Ucrania de armas y combatientes provenientes de Rusia.

El primer ministro ucraniano Arseni Yatseniuk informó el viernes a su gobierno de que debe prepararse para un posible corte de gas ruso de aquí al lunes.

Yatsenyuk explicó en un comunicado que pidió a los administradores regionales y al jefe de la empresa de energía pública que empiecen a aplicar un plan de emergencia para reducir el uso de energía.

Rusia por su parte señaló que no dispone de información sobre una posible reanudación de las negociaciones.

"No tenemos por el momento informaciones sobre el momento en que se podrían reanudar las negociaciones o si se continuarán", declaró Peskov, citado por la agencia Ria Novosti.

Las tropas ucranianas recobraron el viernes el control de Mariupol, un puerto estratégico de 500.000 habitantesen ubicado en las orillas del mar de Azov.

"Gracias al heroísmo de los militares ucranianos, la situación ha sido estabilizada en Mariupol", declaró el presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, quien pidió al gobernador de la región de Donetsk, Serguii Taruta, que instalara provisoriamente en esa ciudad la sede de la administración regional

Por otra parte, Kiev confirmó la muerte de tres soldados en las últimas horas del jueves en Stepanivka, en la región de Donetsk, donde, según el ministerio ucraniano de Defensa, tuvieron lugar "encarnizados combates".

Según el ministerio, los rebeldes perdieron decenas de hombres en los combates.

Para evitar incidentes fronterizos, un oligarca ucraniano, Igor Kolomoiski, propuso construir una valla electrificada y con alambre de púa de 2.000 kilómetros de largo en la frontera con Rusia.

"Este proyecto se puede concretar en seis meses", indicó el vicegobernador de Dnipropetrovsk, Sviatoslav Oliinik, a la agencia Interfax-Ucrania.