Selección Colombia tiene 6 meses para cambiar su rumbo | El Nuevo Siglo
Miércoles, 16 de Noviembre de 2011

 

Las vacilaciones del entrenador Leonel Álvarez y de su asistente Julio Comesaña obligarían a tomar decisiones extremas.
 
Cuando la Selección Colombia de Fútbol gana los directivos son los magos, y cuando pierde quienes la dirigen son los incapaces.
Llevamos 12 años en lo mismo: viviendo de la improvisación, sin dirigentes que planifiquen el verdadero rumbo del combinado cafetero mayores, que se ha perdido los últimos tres Mundiales y como están las cosas en Brasil 2014 tampoco se logrará figurar entre los 32 clasificados, y los directivos son intocables, para ellos los fracasos son normales.
Luis Bedoya y compañía se han declarado en sesión permanente. O sea que en cualquier momento nos saldrán con otra barrabasada… que le den el ‘jaque mate’ al proceso de Leonel Álvarez, insistan en el argentino Gerardo ‘Tata’ Martino y que como el calor de Barranquilla se convirtió en un ‘enemigo’ se vuelva a jugar en los 2.650 metros de altura de Bogotá.
El empate 1-1 ante Venezuela y el 1-2 frente a Argentina han puesto en alerta el futuro de la Selección, que no es ni la sombra del pasado, no porque carezca de jugadores, sino porque no se cuenta con un estratega que atine a ubicar los ases en el terreno de juego. Leonel Álvarez ha intentado hacer olvidar al ‘Bolillo’ Hernán Darío Gómez en los primeros tres partidos del Premundial Brasil 2014, pero la verdad se nota su inexperiencia, y para completar su asistente Julio Avelino Comesaña no se inmuta, situación que obligaría a un cambio extremo, para lo cual tienen 6 meses para variar el rumbo.
Relevar a Álvarez y a Comesaña sería comenzar de ceros. Si traen a Martino, tendría el tiempo suficiente para afinar la estrategia pero no contaría con los jugadores para adelantar un trabajo permanente, situación que acabaría de desajustar mucho más la tarea de Leonel Álvarez, quien, pese a sus indecisiones, con alguien de más experiencia a su lado podrá cumplir con la meta, pues conoce los jugadores, lo único que necesita es saberlos utilizar y sacar los ases de bajo la manga cuando se requiera sobre la marcha, que fue lo que faltó contra los venezolanos y los argentinos, en 180 minutos para olvidar en el estadio Metropolitano-Roberto Meléndez de Barranquilla, donde dejaron escapar 5 de 6 puntos posibles.
“No se debe crear un ambiente que nos lleve al desaliento, a pesar de las circunstancias, porque el resultado ante Argentina no estuvo a la expectativa y la altura de lo que esperábamos, no se puede perder la serenidad y desde la madurez buscarle soluciones”, comentó el ex técnico y ex manager de la Selección Francisco Maturana.
“No podemos culpar a Barranquilla, porque es un análisis superficial; en el pasado clasificamos jugando allí porque teníamos el balón y no teníamos que correr tanto”, agregó el odontólogo, quien ahora mira los toros desde la barrera.
“Un equipo de fútbol es una idea y no puedo opinar sobre lo que planteó Leonel Álvarez, pero todo trabajo necesita tiempo para que dé resultados y debemos esperar que las ideas del técnico florezcan”, expresó, y recomendó que a este grupo de jugadores hay que darle confianza y rodearlos, todos los estamentos deben apoyar el equipo si queremos que le vaya bien. Sin embargo, no podemos dar mayor responsabilidad a James Rodríguez, porque él no es la primera guitarra de Colombia en la actualidad, hay que llevarlo con calma para que lo sea.
Las apreciaciones de ‘Pacho’ Maturana deben ser tenidas en cuenta, e inclusive tomarlas como referencia Leonel Álvarez, quien a la hora de hacer la alineación se está dejando llevar más por los nombres de los jugadores y en qué clubes juegan, que por lo que le pueden dar en la cancha.
Hoy, en medio de las incongruencias, los jerarcas de la Federación Colombiana de Fútbol deberán actuar con cabeza fría. No seguir dejándose llevar por el qué dirán, sino centrarse en el partido de la V jornada de la eliminatoria (2 y 3 de junio 2012) cuando Colombia visitará al herido Perú.
Descabezar a Leonel Álvarez sería la solución más inmediata. Sin embargo, no se puede poner la Selección al garete, en manos de alguien que no garantiza el cupo a Brasil 2014.
En eso Luis Bedoya deberá tener demasiado cuidado, con el fin de no continuar metiendo las de caminar. Una nueva eliminación obligaría a la renuncia en pleno de los directivos de la Fedefútbol, que en cabeza de Bedoya, es excelente buscando dinero, pero pésima a la hora de evaluar resultados.
Colombia concluye el 2011 por fuera de los clasificados a Brasil 2014, ni para el repechaje estamos.