Aunque algunos han manifestado su preocupación por la posible pérdida del mercado nacional, la entrada en vigencia del TLC con Estados Unidos y en general la apertura económica que vive Colombia les abren una nueva oportunidad a las empresas aseguradoras del país, que podrán comprar y vender pólizas internacionales.
Para el gerente Técnico Internacional de Correcol Eric Dremmer, la apertura económica podría verse como una amenaza para el sector asegurador colombiano, pero es más una gran oportunidad de desarrollo y evolución para la industria, más aún si se tiene en cuenta que las principales aseguradoras globales del mercado internacional ya están presentes en el país.
“En general se podría decir que el mercado de seguros colombiano es moderno y maduro, inclusive a nivel de las aseguradoras colombianas como Suramericana, Bolívar y Colpatria”, afirmó Dremmer.
Según el directivo, se estima que en el primer momento de la apertura el seguro de vida sería uno de los sectores en el cual se sienta la participación de nueva competencia y esta situación conlleve a introducir nuevos productos en el área de Seguros de Personas.
Para el caso de los Seguros Generales o de Daños, no se considera que pueda haber un gran efecto inicialmente, a pesar de que se autoriza a ofrecer a las compañías de seguros del exterior productos de seguro especializados tales como transporte marítimo internacional, aviación comercial internacional y responsabilidad civil.
La compra y venta de seguros internacionales se hará gracias a la Ley 1328 del 2009, que dicta las normas sobre cómo la industria colombiana en general debe adaptarse frente a la apertura de Colombia al resto del mundo y el mercado globalizado a partir del 15 de Julio del 2013.
Según la Ley, los colombianos podrán comprar diversos seguros en el exterior.
La preparación
Fasecolda está trabajando activamente frente a este nuevo escenario que empezará en julio de 2013, para lo cual ha constituido un comité dedicado al análisis y estudio de las implicaciones en el mercado asegurador en aspectos tales como el normativo, técnico y de mercado.
Según Dremmer, el gremio de las aseguradoras mantiene conversaciones permanentes con el Ministerio de Hacienda y la Superintendencia Financiera para llegar a acuerdos que eviten la competencia desequilibrada de las aseguradoras que entrarían a competir en el mercado nacional con las compañías de seguros ya establecidas en el país.
“Dentro de los puntos que se han planteado en particular se encuentra el cobro del IVA, los efectos sobre el régimen cambiario y el consumo por Internet”, aclaró.
Ventajas y desventajas
En cuanto a qué ventajas tiene la industria aseguradora local frente a los competidores extranjeros, el Gerente de Correcol señala que “el conocimiento de la normatividad local, los requisitos administrativos, además del idioma español, hacen que tanto a nivel de aseguradoras como de intermediario, el extranjero probablemente prefiera, en una primera instancia al menos, la asociación con actores locales”.
Sin embargo, Demmer precisó que “las aseguradoras y los corredores estadounidenses tienen ventajas tales como productos de seguros más amplios en ciertos segmentos, al tiempo que cuentan con una cultura de seguro más avanzada que la colombiana y esto permite tener tasas más competitivas en algunos casos que aquellas que se aplican en Colombia”.