La embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Susan Rice, anunció el jueves su renuncia a presentarse como próxima secretaria de Estado, tras la fuerte oposición del partido republicano a raíz de sus comentarios tras el ataque al consulado libio de Bengasi en septiembre.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, reaccionó de inmediato al anuncio de Rice y tildó de "injustos" los ataques republicanos que recibió su embajadora ante Naciones Unidas.
Obama aceptó "su decisión de no ser más candidata al puesto de secretaria de Estado" en su próximo gobierno, al tiempo que elogió a la funcionaria, "extraordinariamente capaz, patriota y apasionada".
"Estoy contento de que Susan haya aceptado seguir siendo embajadora ante Naciones Unidas y un miembro muy importante de mi gobierno y de mi equipo de Seguridad Nacional", añadió el mandatario estadounidense en una nota.
"Si fuera candidata, estoy convencida de que el proceso sería lento, perturbador y costoso, para tí y para nuestras prioridades nacionales e internacionales", explicó Rice en una carta dirigida a Obama.
Rice anunció su decisión a la cadena NBC News, que luego fue confirmada por un comunicado de la Casa Blanca.
Rice acaparó las críticas de los republicanos por sus comentarios en diversos medios tras el asalto el 11 de septiembre a la legación diplomática en Bengasi, durante el que fallecieron cuatro estadounidenses, entre ellos el embajador.
AFP