Por años se esgrimió como principal argumento para la salida de jugadores colombianos, en su mayoría jóvenes, al mercado internacional, el bajo costo de sus derechos deportivos.
Sin embargo, con el paso de los días, la percepción ha ido cambiando y con ello, aumentado el valor de los que están en el país y de los que ya hacen presencia en Europa, China u otros mercados, como Turquía, España, Francia, Italia o Inglaterra.
Que se pague una cifra como la que desembolsó el Real Madrid por James Rodríguez, todavía es impensable.
También los números están distantes de los de Carlos Bacca, quien tiene un pie en el West Ham de Inglaterra, ahora que el Milán, a pesar de su gran temporada, no lo quiere mantener en sus filas.
Lo mismo ocurre con Juan Guillermo Cuadrado, cuya transferencia pertenece al Chelsea de Inglaterra, pero todo parece indicar que se quedará en Italia, aunque no en Juventud, sino en el Milán.
Esas cifras que se han pagado por los jugadores que están en nuestro medio, también están muy lejanas a las que ha pagado China por Freddy Guarín, de quien se asegura, está pronto a volver a Italia, o Jackson Martínez, cuyo empresario se mueve por toda Europa buscando un club que apetezca los goles del chocoano.
Sporting de Portugal, por ejemplo, quiere 6 millones de euros por Teo Gutiérrez, una cifra manejable, que está cercana a lo que se mueve por estos días en territorio colombiano.
Otro que está dentro de ese margen es Éder Álvarez Balanta, quien dejó River Plate de Argentina para irse al Basilea.
Camilo Zúñiga, quien está en el mismo rango de los anteriores, a un costo inferior a los seis millones de dólares, está cerca del Watford, de Inglaterra.
Bernardo Espinosa, en plena etapa de recuperación fue contratado por el Middlesbrough, por una cifra cercana a los seis millones de euros.
Y otro que regresó a Europa fue Víctor Ibarbo, ya presentado por el Panathinaikos, en donde espera recuperar el nivel que mostró en Italia.
Los jóvenes
Que los “grandes” se muevan por Europa o de allí a China no es gran novedad a no ser por las altas cifras que por ellos se pagan, pero van avaladas por las campañas que han venido realizando en sus respectivos clubes o con la Selección Colombia.
Pero que una camada de jóvenes que están por los 21 años o menos sí es sorpresa y no porque se dude de su capacidad, sino por los valores en que están avaluados.
Por Roger Martínez, quien tuvo una buena Copa América Centenario y no quería quedarse en Racing, donde dijo, no lo valoraron, el Jiangsu Suning de China pagó algo así como 9 millones de dólares, tres más de lo que se había ofrecido por parte de otros clubes.
Para su carrera profesional no parece muy benéfico que se marche al fútbol asiático, pero para sus bolsillos, los del empresario y los del elenco argentino, sí que lo es.
Pero sin lugar a dudas lo que más sorprende es el monto que se dice pagaría el Manchester City por Marlos Moreno, diez millones de libras, lo que lo convierte en el jugador salido de nuestro medio más caro.
Moreno no llegaría directamente al City de Guardiola, sino que haría tránsito por España junto a Sebastián Pérez, cuya cotización está muy por debajo de lo que se pagaría por Moreno.
A esa lista se suma que Jerry Mina, quien salió hace un mes de Santa Fe para Brasil, podría recalar en el Barcelona, que ya había pedido ser tenido en cuenta en caso de una futura negociación, como primera opción.
Y son más los nombres de jóvenes que se mueven por Europa o para Europa. Andrés Felipe Tello jugará cedido en el Empoli, de Italia.
Benfica fichó al volante Guillermo Celis por cinco temporadas; Miguel Murillo, quien salió del Cali al Peñarol de Uruguay ya está en China.
Además está el sorpresivo traspaso de un jugador que no actuó con continuidad en el fútbol nacional con Millonarios al Sevilla de España: Carrascal y quien apenas estaba saliendo de una lesión.
En la mitad están Edwin Cardona para llegar al Viejo Mundo, Luis Fernando Muriel para cambiar de equipo en Italia y Fabián Castillo, quien dejaría Estados Unidos para ir a España.
El mercado también lo movió el Cali, que traspasó a Mateo Casierra a Holanda y Nacional a Dávison Sánchez también a ese país.
Los clubes que se han convertido en las mejores despensas y por ende los que más dinero recaudan son Nacional, que con el negocio de Marlos Moreno puntea de lejos y Cali que desde hace años viene promoviendo jugadores y tan pronto medio se muestran, son transferidos.
Esto, sin embargo, demuestra que el fútbol colombiano ha ganado reconocimiento internacional y que ya no miran al mercado nacional por barato, sino porque encuentran material de buena calidad para armar equipos competitivos y, que como en el caso del Porto, halló una mina de plata que le dejó 90 millones de dólares cuando vendió a Falcao García y James Rodríguez, más otros 30 por Jackson Martínez.