Así lo manifestó el Presidente Juan Manuel Santos, en donde explicó que sí es su deber prender las alarmas e insistir sobre la importancia de que se promueva una unificación jurisprudencial en la materia.
Las continuas divergencias que se están presentando en las Cortes sobre el régimen de transición en el pago de pensiones, podrían costarle al país 57 billones de pesos en los próximos 20 años.
La alerta fue lanzada por el presidente Juan Manuel Santos durante el VII Encuentro de la Jurisdicción Constitucional ‘Diálogos con el Mundo’, en donde explicó que, sin entrar a juzgar la pertinencia o no de estos fallos, “que no es competencia del Ejecutivo”, sí es su deber prender las alarmas e insistir sobre la importancia de que se promueva una unificación jurisprudencial “que bajo el principio de la ponderación defina claramente la forma como se debe proceder”.
“Hoy quiero llamar la atención sobre la bomba de tiempo que se cierne sobre las arcas de la Nación, es decir, de los colombianos, por causa de las interpretaciones cambiantes y en ocasiones contrarias a la jurisprudencia de la Corte Constitucional, que se vienen haciendo en otras Altas Cortes sobre el tema del régimen de transición de pensiones creado por la Ley 100 de 1993”, señaló el Mandatario.
El Jefe de Estado explicó el costo que tendrían para el país estas divergencias jurisprudenciales: “Pueden llegar a costarle al país desde unos 12 billones de pesos, si sólo tenemos en cuenta funcionarios de la Rama Judicial y los órganos de control, hasta 57 billones de pesos a lo largo de los próximos 20 años, si se extiende la jurisprudencia a todos los servidores públicos”.
El Mandatario lanzó la advertencia al recordar que en Colombia hay riesgos reales que confrontan la viabilidad económica del país y que no se pueden desconocer.
Recordó que hace un año, en este encuentro constitucional, ya había hablado sobre los efectos que sentencias bien intencionadas sobre temas de salud, créditos hipotecarios y ajustes de salario pueden tener no sólo sobre las finanzas públicas sino incluso sobre la equidad, que puede vulnerarse cuando, por proteger el derecho de algunos, se pone en peligro el porvenir de la mayoría.
Por otro lado el déficit del Gobierno no va a ser de 4 por ciento sino de 3.3 por ciento este año, sostuvo Santos.
De acuerdo al Presidente, Colombia finalizará el año con mejores cifras fiscales y macroeconómicas que las que se había previsto inicialmente.
“El Ministro de Hacienda me dio las proyecciones que hicieron en el Ministerio de Hacienda sobre las cifras fiscales y las cifras macroeconómicas al final de este año. Y si no sucede nada imprevisto vamos a ver unas cifras mucho más positivas de lo que se había planeado”, anunció.
Dijo que la inversión pública ya no será de 2.8 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), sino de 2.5 por ciento. “¿Esto en qué se traduce en pesos? En que la inversión pública va a terminar siendo de 16.9 billones de pesos, en lugar de 15.3 (billones de pesos)”, explicó.
Así mismo, los ingresos de la Dirección de Impuestos Nacionales (DIAN) serán mayores en un punto porcentual. Ya no equivaldrán a 13.5 por ciento sino a 12.5 por ciento del PIB.
En dinero esto quiere decir que dichos recursos sumarán 81.2 billones de pesos, en lugar de 75.3 billones. “Casi 6 billones de pesos por encima de lo que teníamos previsto”, destacó Santos.
Manifestó que este reporte del Ministerio de Hacienda es una noticia muy positiva, porque el país estará mucho mejor protegido frente al incierto panorama mundial.