Una nueva denuncia surgió en el marco de las consultas previas que se adelantan en el país para permitir que las empresas exploten recursos mineros en cercanías de comunidades indígenas. Esta vez son las comunidades las que hacen peticiones “innecesarias”, tal como lo explicó el exmagistrado José Alfredo Escobar Sierra.

El hoy presidente del Capítulo Colombiano de la Academia de Intercambio y Estudios Judiciales comentó que las solicitudes para dar el visto bueno para que las multinacionales llegan hasta automóviles o televisión por cable.

El jurista elevó un llamado al Gobierno Nacional y al Congreso de la República para que establezca la normatividad pertinente y se evite caer en acciones irregulares. Su pronunciamiento también se escuchó en el marco del Segundo Seminario Sobre Asuntos Hidrocarburíferos y Ambientales en Bogotá, que realizó la Academia de Intercambios y Estudios Judiciales de Argentina.

En diálogo exclusivo con este Diario, Escobar también se refirió al “limbo jurídico” en el que se encuentra el país luego de la decisión de la Corte derogara el código minero que empezaría a regir a partir de este mes.

EL NUEVO SIGLO: Luego de la decisión de la Corte de declarar inexequible una reforma al Código Minero ¿en qué panorama queda el país?

JOSÉ ALFREDO ESCOBAR:Se encuentra un poco delicada y complicada la situación a raíz de la derogación que hubo del Código Minero porque la Corte Constitucional declaró inexequible 40 artículos y como con ello se volvió a la legislación anterior, eso puede llevar a la parálisis de las licencias en el sector. Las consecuencias negativas se verán reflejadas para la inversión extranjera.

ENS: Entonces, ¿cuál es el llamado al Gobierno en la materia?

JAE:Durante el seminario hicimos un llamado al Gobierno y al Congreso para que legislen pronto en esa materia, esto en la medida en que hay un gran interés internacional para vincularse país, pero no en una legislación que no consulta con la modernidad ni las tendencias actuales.

ENS: ¿Reitera que esto es un limbo jurídico?

JAE: Exacto. Se instó a las comunidades indígenas y afrocolombianas a comprender mejor la filosofía de la Constitución del 91 y que no se convierta en un instrumento de presión contra las empresas extranjeras.

Sucede que esas consultas se vuelven interminables y nunca se pueden llevar a cabo en una consulta expedita. Definitivamente se convierte en un medio de presión para dar al visto bueno, por eso estamos en un limbo jurídico en lo minero y de hidrocarburos.

ENS: ¿Cuáles han sido las exigencias más extravagantes?

JAE:Denunciamos que una comunidad había pedido una antena parabólica en cada una de las casas, entonces uno entra a cuestionar si realmente una antena soluciona sus problemas desde el punto de vista de la identidad y la cultura. Las peticiones son fuera de lugar porque otros pedían camionetas Toyota y prácticamente ninguno sabe manejar. Con eso se desdibujan un poco.

ENS: Entonces las consultas previas están planteadas equivocadamente…

JAE:Sí. Son demasiado demoradas, toman más tiempo del que deben y en últimas exigen unos gestos de buena voluntad para avanzar en las negociaciones que terminan siendo presión. En este momento no puedo dar nombres o zonas exactas, pero por eso lo ponemos en conocimiento.

ENS: ¿Las empresas acceden a este tipo de peticiones?

JAE:En algunos casos ceden para que la consulta avance y luego llegan a unos acuerdos, pero eso tampoco debería ser así. Al parecer no es una irregularidad porque si las empresas están en la búsqueda del acuerdo y creen que pueden pagar esas cosas pues lo hacen.

ENS: ¿Cuál es la solución que plantea?

JAE:Que se establezcan unas reglas de juego claras y precisas, no al vaivén de los caprichos de las comunidades, o entonces por qué no piden alcantarillado o cosas más útiles. El tema resulta ser complejo en la medida en que no se le da celeridad a este tipo de procesos sino que se hace más dilatorio.

ENS: Pero también se ha denunciado atropello de las multinacionales y ofrecimientos absurdos. ¿Qué decir ante ello?

JAE:Todo esto está mal porque no se soluciona ni pidiendo cosas innecesarias ni entregando dos cabras por un acuerdo. Esas denuncias no se tocaron en el seminario, eso también puede pasar, pero lo que sí se necesita son parámetros de transparencia porque acá cada quien trata de defenderse a su manera y mire cómo estamos. El tema se vuelve perverso porque piden un poco de pendejadas que no sirven para nada.