“Se ha subestimando la Justicia Transicional” | El Nuevo Siglo
Viernes, 21 de Junio de 2013

Durante la Conferencia Internacional sobre Derecho Internacional Humanitario y Derecho Penal Internacional en el Derecho Interno y Crimen Organizado, realizada en la Universidad Javeriana, el Viceministro Miguel Samper Strouss aseguró que cualquier medida de justicia transicional que se aplique en Colombia debe conducir a la no repetición de conductas que llevaron a los graves crímenes en el país.

 

“En otros países el índice de reincidencia en la criminalidad, luego de una desmovilización, supera el 30 por ciento de los desmovilizados. La construcción de ese camino hacia la transición, que emprendimos hace unos años y que debemos afianzar luego de que se produzcan los resultados de la Habana, deben tener a Colombia en un punto de partida tal que nos permita no retroceder como en otras latitudes, sino dar pasos firmes siempre hacia un futuro en paz”, indicó Samper.

 

Durante el cierre de la jornada de hoy, el alto funcionario indicó que en los debates recientes se ha subestimado el potencial de la justicia transicional, y que esta va mucho más allá de la discusión sobre el monto de la pena, o la judicialización de las personas.

 “Hay que decirlo en todos los tonos: justicia transicional implica también medidas de verdad, reparación y garantías de no repetición. En los debates recientes se ha venido subestimando el potencial de la Justicia Transicional. Cuando se dice, simple y llanamente, que Justicia Transicional equivale a impunidad, se está mirando el potencial de esta justicia con un microscopio”, indicó. Y agregó que es inaplazable que la justicia transicional venga acompañada de unas políticas de desarrollo desde lo local para que las víctimas salgan de su situación de vulnerabilidad.

 

Samper Strouss explicó también que debe trabajarse en el fortalecimiento de las instituciones, lo que permitirá desescalar los conflictos sociales que existen: “Debemos encaminar nuestros esfuerzos para que la justicia comunitaria y otras formas de justicia no formal, lleguen a todos los rincones del país”, indicó. 

 

“Si bien no se puede hablar de transición sin justicia, se debe desmitificar la necesidad de imponer penas como una especie de venganza pretendida por las víctimas. La privación de la libertad no es un fin en sí mismo perseguido por las víctimas, sino es observado como un medio para generar verdad, reparación y, en especial, garantías de no repetición”, indicó Samper, quien explicó además que recorrer el país escuchando a las víctimas deja como lección que el principal clamor es la verdad. 

 

“Al intentar validar la justicia ordinaria como el mecanismo de sanación de las heridas, se está minimizando el clamor de la sociedad y las víctimas, como si lo único que permitiera hacer tránsito a la paz fuera encerrar a los victimarios por el resto de sus días en la cárcel”, concluyó el alto funcionario.