Las nuevas condiciones de liquidez a nivel global han encarecido el financiamiento público, desvalorizando los títulos de tesorería (TES) que concentran la casi totalidad de la deuda pública doméstica.

Un análisis de Fedesarrollo indica que, el panorama político interno permite avizorar un eventual incremento en el gasto de la nación, en respuesta a las demandas manifestadas en las intensas protestas sociales que han sacudido al país en lo corrido del año.

Desde mayo de 2013, sin embargo, la situación ha cambiado sustancialmente como consecuencia de las perspectivas de un cambio en la política de liquidez de parte del banco de la reserva Federal de los Estados Unidos, fenómeno paradójicamente asociado al mejor desempeño de la actividad productiva en esa economía.

Los márgenes de riesgo que pagan los bonos colombianos en los mercados internacionales pasaron de poco más de 100 puntos básicos (pbs) en el mes de abril a casi 200 pbs en agosto, algo que sucedió de manera muy parecida en todas las economías emergentes y en particular en las latinoamericanas.

Paralelamente, el mercado de renta fija en Colombia ha estado caracterizado por fuertes episodios de volatilidad y una marcada desvalorización de los Tes.

Al  iniciar 2014, Colombia habrá colocado cerca de 13 billones en TES con un sobrecosto entre 150 y 200 puntos. Adicionalmente, las nuevas colocaciones en 2014 (36 billones de pesos entre TES y bonos externos) también se verán afectadas por las mayores tasas de interés. Así las cosas, el sobrecosto de los intereses podría oscilar entre 530 y 660 miles de millones de pesos en 2014, dependiendo el cronograma de emisión.

Indica la entidad de investigación que “todos estos elementos generan presiones sobre las finanzas públicas y tienen en común el hecho de haber sido absolutamente imprevisibles desde el punto de vista de la planeación fiscal, contemplada en el Marco Fiscal de Mediano Plazo (MFMP) del Ministerio de Hacienda”.

Señalan que en efecto, en 2013 el presupuesto de gastos del Gobierno ya fue modificado, pasando de 185,5 a 188,9 billones de pesos, luego de una adición aprobada por el legislativo el pasado mes de junio. Esto es, un incremento de más de 3 billones de pesos, equivalentes a cerca de medio punto porcentual del PIB. Asimismo, para 2014 el monto de recursos para gasto del Gobierno ascendería a 203 billones de pesos, también por encima de los 200 billones inicialmente aprobados por el Congreso de la República.