La nueva reunión para definir la franja de precios de los combustibles se realizará mañana desde las 8 de la mañana, en la que los transportadores y el Gobierno instalarán de nuevo la mesa de diálogo para evitar un cese de actividades.

Precisamente el ministro de Minas, Amylkar Acosta, explicó recientemente que “el Gobierno ha dicho claramente que participa de la preocupación que tiene el gremio transportador sobre el costo de los combustibles, así como ha participado de la preocupación de los industriales por el costo de la energía”.

Por lo que pone todo su empeño “para ver de qué manera se logra estabilizar el precio de los combustibles, y de qué manera se pueden aliviar los costos de energía para los industriales”.

Sin embargo, la cita no solo obedece a la definición de los precios sino a la petición de los pequeños transportadores de movilizar la carga de crudo.

Al ser preguntado por la posible congelación del valor de los combustibles, Acosta enfatizó en que “a lo que no se puede comprometer el Gobierno es a congelar el precio pero sí a buscar la manera de estabilizarlo. Haremos todo lo posible por lograr estabilizar al máximo el precio y el Gobierno está abierto a explorar alternativas”.

Cabe recordar que, tal como lo informó en su momento EL NUEVO SIGLO, la última reunión inició con amenaza de un posible paro, por ello, hay quienes reiteran que el transporte público debe contar con especificaciones diferentes al privado.

Esta es la premisa del presidente Ejecutivo  de la Asociación Colombiana del Transporte Terrestre Automotor Especial (Acoltes), Lupoani Sánchez Celemín, quien insistió en que “vamos a seguir con la fórmula que planteamos desde hace un año, que al transporte especial y a todo el servicio público se le debe dar un calificativo de transporte profesional”.

En todos los países del mundo, “el transporte público tiene una categorización diferente y precios diferentes, para considerarlos como grandes consumidores y no se involucre en la misma categoría del transporte particular”.

En su opinión, el Gobierno no ha cumplido, pese a reconocer que el año pasado no hubo aumento de precios, “pero el hecho de que ya el ACPM prácticamente lo convirtieron al mismo precio de la gasolina corriente, es delicado. Son casi 500 mil vehículos que usan ACPM, que transportan al 90% de los habitantes del país y casi que el 10% están en vehículos particulares”.

Para Sánchez es sorpresivo que el Gobierno les haya dado la misma categorización y, dice, “nos subieron el precio en las mismas proporciones del transporte particular. Somos mayores exportadores de petróleo y no podemos pagar la gasolina al precio internacional”.

Descartó de tajo un cese de actividades, pero está dispuesto a escuchar a las partes para agotar todas las vías de diálogo.

“También hemos planteado propuestas en el Congreso, como lo hecho a través del senador Velasco, porque la fórmula que hoy tiene el Gobierno está cargada de impuestos”, añadió.

En sentido similar se mostró el presidente de la Asociación Nacional de Empresas Transportadoras de Carga por Carretera (Asecarga), Jairo Herrera Murillo, quien manifestó que son partidarios de congelar los precios de los combustibles (haciendo alusión a la petición de algunos sectores de reducirlo en $2.500)

En cuanto al ACPM, explicó que el Gobierno debe decidir a principio de año el porcentaje a aumentar, “pero no subiendo a cada rato porque no permite una sana operación”.

Cree que estas propuestas son las más viables mientras se llega a un proyecto de ley. “El Ministro de Minas ha sido receptivo, pero el Gobierno convocó a la mesa porque está presionado por un paro de la ACC, la Confederación Colombiana Transportadora y la CCT, es decir los gremios camioneros no los empresariales. No estamos de acuerdo con ninguna vía de hecho”.