Carlos J. Murcia

Periodista de El Nuevo Siglo

Que los colegios no les dejen tareas a los jóvenes, es lo que pretende un proyecto de ley que se presentaría el 20 de julio.

El autor de la iniciativa, el pastor Edgar Espíndola, senador del Partido de Integración Nacional (PIN), explicó que lo que se quiere es que en los colegios no les dejen tareas a los niños para desarrollarlas en las casas.

“Hoy encontramos que los niños se levantan a las cinco de la mañana, hacen su aseo, desayunan, salen corriendo a la ruta; y llegan a la tres y media de la tarde a sus casas, pero llegan con un montón de tareas a desarrollar, que si uno se da cuenta, eso no lo hace un trabajador activo”.

Para el senador Espíndola es fundamental que se respeten los espacios a los jóvenes para que puedan desarrollar unas habilidades diferentes. “Yo propongo que las tareas los niños las ejecute fundamentalmente en el colegio con su compañeros y los profesores”.

Expresó que en las horas libres se les pueda incentivar en actividades musicales, recreativas y que se desarrolle en ellos compromisos con la comunidad.

Con el senador Espíndola estuvo de acuerdo el profesor Libardo Polanía, educador de la Secretaría de Educación del Distrito Capital, quien manifestó que efectivamente los colegios deben incentivar es la investigación y el uso de las tecnologías.

“No deben dejar tareas. Yo diría que deberían extender los horarios de las clases en los colegios y que lo que se haga tenga un acompañamiento educativo. Lo ideal es la jornada extendida y tiempos escolares más prolongados”, expresó el docente.

Otro maestro, Gerardo Dussán, cree que uno de los motivos de la baja calidad educativa en los colegios oficiales es que se ha llegado al exceso de actividades y con cero tareas. Consideró que las tareas deben persistir pero de manera moderada.

La propuesta ya tiene contradictores en el Congreso. El senador Alexander López, del Polo Democrático Alternativo, indicó que en todos los pensum de formación siempre se ha tenido como pilar fundamental el complementar la educación en el aula con las tareas que se desarrollan en la casa.

“No sé qué argumentos científicos exprese el doctor Espíndola para decir que no se requiere dejarle tareas a los niños para la casa. Creemos entonces que tendrá algunas razones, pero yo no lo comparto. Creemos que la forma como se ha venido educando a los colombianos ha sido acertada”, dijo.

El senador Carlos Ferro, del Partido de La U, manifestó que en los procesos educativos hay siempre una continuidad y que “las tareas hacen parte de ese aprendizaje. Los estudiantes, las necesitan para reforzar el conocimiento”.

También mostró su desacuerdo el senador Efraín Cepeda, presidente del Directorio Nacional Conservador, quien explicó que ese proyecto es imposible porque las tareas hacen parte fundamental del aprendizaje.

El senador del Partido Verde, Jorge Londoño, criticó que se piense en presentar un proyecto de ley solo para que las instituciones educativas no dejen tareas, cuando ese tema se soluciona en el interior de las juntas de educadores. “Con todo el respeto que le tengo al senador Edgar Espíndola, me parece que eso no soluciona el problema de la falta de calidad en la educación y eso no es vital para la formación de un niño”.

Londoño anotó que lo importante es que se retomen muchas cosas de cómo se está impartiendo la educación a nuestros estudiantes, pero que les dejen o no les dejen tareas eso no soluciona en nada en la formación.

“En Japón si mal no recuerdo, los niños estudian alrededor de 14 o 15 horas y es importante que de una manera racional a los jóvenes se les exija y se les deje tareas”, explicó.

Carlos Alberto Baena, presidente del MIRA, manifestó que las tareas son necesarias pero no en exceso y aclaró que el peligro de que no se les dejen tareas a los estudiantes es que pueden caer en la drogadicción.

“Creo que sí se necesita. Inclusive promover la investigación, que no se exagere dejando las tareas que impiden que los niños tengan contacto con sus familias. Pero de todos modos en un país como Colombia, donde no hay buenos escenarios deportivos, dejar a los niños sin tareas de alguna manera sería fomentar el ocio y podría generar más problemas sociales”, indicó.

El ex senador huilense Carlos Julio González consideró que el proyecto que se prepara va más allá de lo que las leyes pueden hacer en materia de desarrollo del modelo pedagógico, de la concepción misma de la pedagogía.

“Creo que la iniciativa podría estar regulando más allá de sus límites, materias que son de competencia de la autonomía pedagógica. Pero sí hay colegios que ponen excesivas tareas y que esclavizan a los niños. Eso es cierto”, aseguró. 

El concejal bogotano Javier Palacio, del Partido de La U, dijo que le parece una locura el hecho de acabar con las tareas: “A los estudiantes hay que colocarles tareas pues es la forma de reforzar lo que aprenden además se les coloca responsabilidades”.