La policía dispersó la noche del martes con bombas lacrimógenas y balas de goma a unas 300 personas en el centro de Sao Paulo, que demandaban la liberación de manifestantes detenidos en anteriores protestas antiCopa, reportaron medios locales.
La policía confirmó a la AFP la participación de unos 300 manifestantes, pero no entregó mayores detalles. En tanto medios de prensa informaron de la detención de unas seis personas durante la protesta, aunque al menos dos ya habían sido liberados tras declarar ante las autoridades.
La protesta se organizó en demanda de la liberación de un estudiante y un profesor detenidos durante una protesta el 23 de julio, contra los gastos públicos realizados en la Copa del Mundo.
Según informó el portal de noticias del diario O Estado de Sao Paulo, ambos individuos son sindicados como miembros de Black Bloc, agrupación a la que las autoridades responsabilizan de violencia y vandalismo durante las protestas.
Ambos detenidos fueron inculpados de asociación criminal, porte ilegal de arma de uso restringido, incitación a la violencia, entre otros. La defensoría pública pidió su libertad y aseguró que ellos no pertenecían al movimiento Black Bloc, pero un tribunal se las negó, precisó el portal de noticias G1.
Los Black Bloc brasileños están inspirados en el movimiento antisistema surgido en Alemania en los 80, con el uso de vestimentas completamente negras como táctica en sus actividades.
Masivas protestas sociales estallaron hace un año, en plena Copa Confederaciones, cuando más de un millón de brasileños salió a la calle para condenar los gastos públicos de 11.000 millones de dólares destinados a la organización del Mundial en lugar de invertirlos en hospitales, escuelas o transporte.
Pero las últimas concentraciones han sido mucho más pequeñas, y si bien intensas a inicio de año, con el paso de los meses han mostrado a brasileños más preocupados del fútbol o temerosos de la violencia que se ha desatado regularmente en estos encuentros.