Santos sigue liderando en las encuestas | El Nuevo Siglo
Jueves, 20 de Marzo de 2014

Las previsiones que hacían algunos candidatos presidenciales en torno a que el resultado de los comicios parlamentarios del pasado 9 de marzo iban a impactar de manera sustancial el escenario de la contienda por la Casa de Nariño no se cumplieron, aunque es claro que sí hubo algunas variaciones interesantes.

Por lo menos así se desprende de la comparación de las últimas cuatro encuestas que se revelaron después de las elecciones parlamentarias y que fueron llevadas a cabo por las firmas Datexto (16 de marzo), Centro Nacional de Consultoría (17 de marzo), Gallup (19 de marzo) e Ipsos Napleón Franco (20 de marzo) para distintos medios de prensa, radio y televisión.

El primer elemento que se debe señalar es que el presidente-candidato Juan Manuel Santos sigue teniendo una ventaja amplia en las encuestas, pues su promedio es de 28% en los cuatro sondeos (en los escenarios de la primera vuelta), más que doblando a su más inmediato seguidor, el ahora candidato presidencial Enrique Peñalosa, que suma 13,1%, y aún más lejos está el aspirante del Centro Democrático, Óscar Iván Zuluaga, que alcanza un 12,3%.

Se podría decir, entonces, que el triunfo de la coalición de Unidad Nacional en los comicios parlamentarios (La U, conservadores, liberales y Cambio Radical ganaron 66 de las 102 curules de Senado) se está reflejando en las encuestas, pues Santos sigue con una amplia ventaja en las mismas, tal y como ocurría en los sondeos que se hicieron entre enero y la primera semana de marzo.

El resultado del Presidente-candidato es más destacable aún si se tiene en cuenta que tanto Peñalosa como Zuluaga registraron un aumento en las encuestas frente a lo que pasaba en el primer bimestre, cuando se peleaba la punta del lote perseguidor pero con porcentajes que apenas sí bordeaban el 10%.

Es claro, entonces, que se está reflejando en estos nuevos sondeos que el Centro Democrático, con el expresidente Uribe a la cabeza, logró conquistar 19 escaños en el Senado y 12 en la Cámara, resultado que se considera importante para una colectividad debutante en las urnas pero que está muy lejos de los pronósticos que se hacían en las toldas del exmandatario en torno a quedarse con el 40% de los escaños en la Cámara alta.

Zuluaga, como portaestandarte del uribismo y medido este último ya en las urnas, parecería haber alcanzado ya el techo electoral de esa corriente política, toda vez que el promedio que tiene en las últimas cuatro encuestas es ligeramente inferior al que logró el Centro Democrático en la elección de Senado, que fue de 14,2%, según el último boletín de preconteo que expidió la Registraduría el 10 de marzo.

 

Peñalosa avanzó, pero…

 

A su turno, Peñalosa fue el que más logró avanzar en las encuestas, pues está un poco más arriba del 13%. Sin embargo, hay que decir que un crecimiento apenas de tres o cuatro puntos frente a los que tenía en el primer bimestre es muy bajo para alguien que en la consulta interna de la Alianza Verde logró más de dos millones de votos.

¿Cómo explicar este fenómeno? Hay una hipótesis: que muchos de quienes votaron en la consulta (en la que hubo también más de un millón de votos por los otros dos precandidatos y otro tanto entre votos nulos y no marcados) sufragaron porque les pareció interesante el ejercicio o les entregaron el tarjetón en la mesa de votación. Sin embargo, no por ello se puede considerar que, en materia de presidenciales, su candidato favorito sea el exalcalde de Bogotá. De allí que a medida que pasan los días y se decanta el escenario presidencial, al tiempo que queda atrás el impacto político y mediático inicial de los comicios parlamentarios y la consulta, la ciudadanía empieza a ubicarse y aquí, al menos en el escenario de primera vuelta, Peñalosa ha venido perdiendo esta semana algo de terreno, como se evidencia en la tabla comparativa de las cuatro encuestas.

 

Tercer lote

 

En lo que se refiere a las otras dos candidatas en disputa, en estos cuatro sondeos la de mayor repunte ha sido la aspirante del Polo, Clara López, pues no sólo superó a la conservadora Marta Lucía Ramírez, sino que ya se acerca al 10 por ciento en el promedio de las preferencias, algo significativo si se tiene en cuenta que en el primer bimestre de este año no salía de porcentajes entre el 5 y 7%. En tanto que Ramírez, si bien en los últimos sondeos subió, después de trasegar en muchas encuestas con porcentajes menores, en el promedio queda en la última casilla entre los presidenciables, con apenas 7,5%.

 

Cayó el voto el blanco

 

Otro de los hechos significativos en las cuatro encuestas posteriores a los comicios parlamentarios se refiere a que el voto en blanco, que se convirtió en fenómeno político en las encuestas del primer bimestre, alcanzando incluso porcentajes del 41%, se desinfló rápidamente. Ahora apenas sí bordea el 16%, lo que evidencia que muchos de los que antes decían que iban a votar en blanco, no era porque hubieran analizado las propuestas de los candidatos, sus perfiles y fórmulas vicepresidenciales, y después de ese ejercicio hubieran concluido que ninguno les convencía. En realidad en la franja del voto en blanco lo que había era mucho indeciso que con el pasar de las semanas se ha ido inclinando por una u otra opción. Ello explica, de paso, por qué el porcentaje del “No sabe/No Responde” también es particularmente bajo (apenas de 12,3%), cuando en anteriores contiendas presidenciales siempre bordeaba el 20% o más, sobre todo faltando dos meses largos para la primera vuelta.

En cuanto a los escenarios de posibles enfrentamientos para una eventual segunda vuelta, que todo hace prever que habrá, Peñalosa fue la sorpresa en las encuestas de Datexco y el CNC, pues le ganaba por escaso margen a Santos, pero ya en las de Gallup e Ipsos el Presidente-candidato vuelve a superarlo a él y todos los demás contendores.