La carrera por el tiquete presidencial republicano sigue en tablas. El ultraconservador Rick Santorum se posicionó como la única alternativa a Mitt Romney en la puja por la candidatura a la Casa Blanca tras su sorpresiva doble victoria del martes en Alabama y Misisipi, dos estados del "sur profundo" de Estados Unidos.
El premio de consolación para Romney, exgobernador de Massachusetts y todavía favorito en la contienda, fueron sus victorias ese mismo día en Hawai y en la Samoa estadounidense, mientras que el expresidente de la Cámara de Representantes, Newt Gingrich, ve alejarse sus posibilidades de triunfo tras no vencer en ningún estado durante la jornada.
Las victorias de Santorum, católico acérrimo cercano al Opus Dei, en Alabama y Misisipi ponen de manifiesto que Romney, tras meses de campaña y a pesar de contar con más dinero y mejor organización, no ha logrado todavía conectar con el lado más conservador del partido ni convencerle de que es el candidato más fuerte para enfrentarse al presidente Barack Obama en las elecciones del 6 de noviembre.
A la ofensiva
Tras declararse ganador en ambos estados del "cinturón bíblico" del país, Santorum hizo alarde de sus credenciales conservadoras, metiendo el dedo en la llaga de Romney, criticado en las filas republicanas por ser demasiado moderado y liberal.
"¡Lo hicimos de nuevo!", dijo Santorum ante sus extasiados seguidores en Lafayette, Luisiana, a donde se había trasladado tras la intensa campaña en Alabama y Misisipi.
"Ahora es el momento para asegurarnos, para garantizar que tenemos la mejor oportunidad de ganar esta elección y la mejor oportunidad de ganar esta elección es nombrar a un conservador para enfrentar a Barack Obama", agregó.
"Vamos a competir en todas partes", afirmó exultante, al tiempo que se burlaba de la incapacidad de Romney para ganarse a los votantes en varios estados a pesar de gastar millones de dólares en propaganda, en gran parte dedicada a atacar a sus oponentes.
Con el 99% de los votos escrutados, Santorum se colocó a la cabeza en Alabama con 35% de los votos, y Gingrich y Romney empataron en el segundo lugar, ambos con 29%, según datos reportados por CNN.
En la vecina Misisipi, la carrera se mantuvo hasta último momento, con Santorum en 33%, Gingrich 31% y Romney 30%, con 99% del escrutinio realizado.
El congresista texano libertario Ron Paul terminó en un distante cuarto lugar en ambos estados.
Premio de consolación
Horas después de la doble derrota, Romney sin embargo se consoló con la noticia de ser el ganador en la isla de Hawai -donde nació su eventual rival Obama-, así como en la Samoa estadounidense, según el sitio en internet del Partido Republicano.
Con el 82% de los "caucus" (asambleas de partido) escrutados, Romney contaba con el 45% de los votos, por delante de Santorum (25%), Paul (18%) y Gingrich (11%), indicó la web.
Romney había divulgado un comunicado felicitando a Santorum por su doble victoria, pero insistía en que seguía siendo la mejor opción.
"Estoy complacido porque vamos a incrementar nuestro número de delegados considerablemente después de esta noche", dijo Romney, que ya cuenta con alrededor del 40% de los 1.144 necesarios para convertirse en el candidato presidencial del partido.
"Con los delegados ganados anoche, estamos aún más cerca de la nominación", agregó.
Empujón
Pero los expertos estimaron que el triunfo de Santorum prueba que tiene aún posibilidades de competir por la Casa Blanca, cuando restan por disputarse primarias en 20 estados y en Washington DC.
"La doble victoria de Rick Santorum en Alabama y Misisipi lo convierten en la alternativa clara a Mitt Romney", dijo Charles Franklin, cofundador de pollster.com y profesor en la escuela de derecho de la Universidad Marquette.
"Su débil actuación sigue poniendo de relieve la vulnerabilidad de la campaña de Romney, especialmente entre la base republicana socialmente conservadora", agregó.
Los resultados del martes también suponen un gran problema para Gingrich: ha obtenido sólo dos victorias de las decenas de elecciones y caucus celebrados hasta ahora.
"El fracaso de Gingrich para ganar en cualquiera de los estados del sur debilita sus argumentos para permanecer en la carrera", dijo Franklin.
Cuenta regresiva
Gingrich, quien se enfrenta a los llamados para renunciar a la candidatura y permitir que los conservadores voten en bloque a Santorum, felicitó a su rival por su "gran" doble victoria, pero dijo que lucharía hasta llegar a la convención republicana en Tampa (Florida) en agosto, cuando se decidirá la nominación.
También insistió en que el discurso de Romney como el candidato inevitable "acaba de derrumbarse." "Si tú eres favorito y sigues llegando en tercer lugar, tú no eres demasiado un favorito", afirmó.
Pero lo cierto es que el escenario creado con el triunfo de Santorum en estados considerados proclives a Gingrich podría suponer el retiro de su carrera.
AFP