Dos colombianos figuran entre las 19 víctimas mortales del ataque al Museo Nacional del Bardo, en Túnez, en el que también fallecieron otros 15 turistas.
Las víctimas fueron sorprendidas por la aparición de hombres fuertemente armados cuando bajaban de autobuses de turismo y perseguidos hasta el interior del recinto.
Según el último balance oficial difundido por las autoridades tunecinas, que rebaja la cifra de fallecidos, el asalto perpetrado por hombres armados deja 19 muertos: 17 turistas y dos tunecinos (un policía y un conductor de bus). Inicialmente las autoridades habían dado cuenta de 22 muertos, entre ellos 20 turistas.
Las autoridades informaron de que los dos asaltantes murieron durante el ataque, en el cual resultaron heridas 44 personas.
El presidente Juan Manuel Santos fue quien confirmó la muerte de los colombianos en ese hecho al tuitear que “lamentamos muerte de 2 colombianos en Túnez y ofrecemos condolencias a su familia” y anunciando que la Cancillería “está trabajando en su repatriación".
Posteriormente fue el propio general en retiro José Arturo Camelo, en diálogo con Blu Radio, quien informó que las víctimas colombianas fueron su esposa Miriam Martínez de Camelo y su hijo Javier Camelo Martínez.
El general manifestó que con su familia eran parte de un grupo de 40 turistas hispanohablantes que realizaban la parte final de su excusión, un crucero por el mar Mediterráneo que había partido de Italia y tras su visita a Túnez, él volvería con los suyos a España para tomar el avión de regreso a Colombia.
La Cancillería dijo en un comunicado que "en las próximas horas funcionarios de la Embajada de Colombia en Argelia, cuya sección consular tiene la circunscripción para Túnez, viajarán a dicho país para encargarse del proceso de repatriación de los cuerpos de las víctimas".
"Colombia manifiesta su firme compromiso con el respeto de los derechos humanos y, en ese sentido, reitera su más categórico rechazo a los actos terroristas y de violencia", indicó la Cancillería.
El primer ministro tunecino Habib Essid dijo por televisión que entre los turistas fallecidos hay "cuatro italianos, un francés, dos colombianos, cinco japoneses, un polaco, un australiano y una española". Por el momento se desconoce la nacionalidad de las otras dos víctimas.
Por su parte, el ministro español de Exteriores, José Manuel García-Margallo, afirmó que eran dos los muertos de nacionalidad española y una de las víctimas fue identificada.
"No puedo descartar que haya más muertos y no puedo descartar que haya más heridos", dijo García-Margallo.
El presidente François Hollande anunció por la noche en un comunicado que dos franceses figuraban entre los turistas muertos y siete estaban heridos, uno de ellos de gravedad.
El primer ministro japonés Shinzo Abe confirmó "por el momento" la muerte de tres japoneses, además de tres heridos.
Essid precisó a su vez que en el ataque murieron dos tunecinos, un policía y un conductor de autobús.
El primer ministro indicó que los asaltantes, vestidos con uniforme militar, habían abierto fuego contra los turistas mientras que estos últimos bajaban de sus autobuses, antes de perseguirlos hacia dentro. Un centenar de turistas se hallaban en el museo cuando "dos hombres o más, armados con kalashnikov" llevaron a cabo el ataque.
El Ministerio del Interior anunció que la "operación se terminó" hacia las 15 horas GMT (10 de la mañana, en Colombia), o sea unas cuatro horas después de iniciarse los incidentes.
"Hemos visto que no eran cohetes sino que eran unos terroristas que estaban disparando a todo el mundo que estaba caminando por la plaza. Luego han entrado en el museo", dijo a la española Cadena Ser, Josep Lluis Cusidó, un turista que sobrevivió al ataque.
El turista dijo que logró refugiarse detrás de una columna y que tuvo que permanecer en el suelo durante tres horas.
Una empleada del museo, dijo haber oído "intensos disparos" hacia mediodía.
"Mis colegas gritaron: '¡Huye, huye, hay disparos!", declaró a la AFP Dhouha Belhaj Alaya. "Nos escapamos por la puerta de atrás con colegas y turistas", agregó.
El ataque contra el museo, ubicado en un edificio contiguo al Congreso, perturbó la sesión parlamentaria.
La diputada Sayida Ounissi contó que se oyeron disparos, "en plena audición de las fuerzas armadas sobre la ley antiterrorista", con la presencia, entre otros, del ministro de Justicia, jueces y varios mandos militares, cundió el "pánico".
El presidente tunecino Beji Caid Essebsi acudió al hospital de la ciudad de Túnez en la que se ingresó a los heridos.
Túnez registra el auge de un movimiento yihadista armado desde la revolución de enero de 2011 que obligó a Ben Ali a abandonar el cargo de presidente que ocupaba desde hacía 23 años.
Unos 60 policías y militares han muerto en enfrentamientos armados cerca de la frontera argelina, donde es activo un grupo armado vinculado a Al Qaida.
Por otra parte, Túnez se ha convertido en una de las principales canteras para los grupos islamistas armados en Siria, Irak y Libia.
De 2.000 a 3.000 tunecinos combatirían en las filas yihadistas en el extranjero. Medio millar más han regresado a Túnez, según la policía, y están considerados como una de las máximas amenazas para la seguridad del país./EL NUEVO SIGLO con AFP
Turistas y transeúntes fueron evacuados rápidamente del museo del Bardo, en Túnez, donde se registró el sangriento ataque de hombres armados que asesinaron a 22 personas, entre ellos dos colombianos./ AFP