Aunque el Gobierno anunció que expedirá un decreto que eliminará la contribución del 8,9 por ciento a las tarifas del gas al sector industrial, los últimos resultados negativos de la producción manufacturera demuestran que estos alivios no serán suficientes.
La semana pasada, el presidente Juan Manuel Santos, dijo a los industriales que el alivio en los precios del gas está encaminado a promover la competitividad de las industrias.
El mandatario sostuvo que "hemos escuchado esta legítima preocupación de la industria, y hoy podemos anunciar que en los próximos días expediremos un decreto para que todos los industriales -sin excepción- puedan gozar de este beneficio", añadió.
El presidente Santos manifestó que esta medida demuestra el compromiso del Gobierno en materia de reducción de costos para el aparato productivo.
A esta determinación del Gobierno se sumó la decisión del Banco de la República de bajar las tasas de intervención en 0,5 por ciento dejándolas en 3,25 por ciento, para permitir que el sector industrial se revitalizara.
Precisamente esta reducción fue solicitada por el presidente de la ANDI, Luís Carlos Villegas quien afirmó con anterioridad a la reunión de la Junta Directiva del Emisor que “espero que por esa misma vía de descenso en las tasas de interés, no sean de 25 sino de 50 puntos básicos, para dar un mensaje claro de que el Banco sí está dispuesto a mantener altos niveles de crecimiento”.
Al respecto, el jefe de investigaciones de Serfinco, Daniel Lozano, explicó en un detenido análisis sobre la situación del sector que “creemos que los resultados de enero en los indicadores de producción industrial y ventas al por menor fueron anticipados por la Junta de Codirectores del Banco de la República. En este sentido, el Emisor justificó parte del recorte de 50 puntos básicos en la posible debilidad de la industria y del consumo en el primer trimestre del año”.
Durante enero de 2013, la producción industrial registró una contracción anual de 1,7 por ciento. “Esta cifra mantuvo el sesgo bajista contemplado por Serfinco donde proyectábamos una variación de -2,3 por ciento, mientras que el mercado esperaba un cambio de sólo -0,7 por ciento”, señala Lozano.
El investigador señala que la variación negativa de enero es inferior a la observada en diciembre (-3,1 por ciento). No obstante, muestra un deterioro con relación a lo evidenciado un año atrás (+2,1 por ciento). Asimismo, la media móvil de tres meses pasó de -2,0 por ciento a -2,9 por ciento, marcando la continuidad de la tendencia negativa.
Adicionalmente, de las 48 actividades fabriles medidas en el Índice de Producción Industrial, 28 registraron una contracción. Esto implica un leve incremento en el número de actividades industriales con deterioro, con respecto a diciembre y enero de 2012.
Asimismo, la menor dinámica de la producción industrial se explica en gran medida por las variaciones negativas de la industria manufacturera, la producción de minerales no metálicos y la producción de hierro y acero.
Por otra parte, la ANDI señala en su última encuesta de enero, que entre los principales obstáculos que perciben los empresarios al comienzo de este año, están: baja demanda, tipo de cambio, alta competencia en el mercado, costo y suministro de materias primas, contrabando, bajos márgenes de rentabilidad, baja rotación de la cartera, infraestructura y costos logísticos y falta de capital de trabajo.