Aproximadamente 2,5 billones de pesos recibiría el sector salud para superar la crisis que tiene desde hace algún tiempo, cuando fue aprobado anoche por la plenaria del Senado el proyecto de ley de cuentas maestras, una iniciativa del ministro de salud, Alejandro Gaviria, y que tiene como objetivo definir medidas para mejorar la liquidez del sector a través del uso de recursos que corresponden a saldos de cuentas maestras.
El Ministro de Salud dijo que a través del proyecto se busca canalizar esos dineros para aquellos hospitales públicos del país que están atravesando por crisis económicas.
“son cuentas especiales que solo podían gastarse en el régimen subsidiario de salud, pero que ahora ‘se canalizan’ a los hospitales públicos (…) si uno suma lo de las cuentas maestras y otros fondos estamos hablando de 2.5 o 3 billones de pesos”, dineros que irían a las entidades en crisis para mejorar un poco la situación financiera que presentan.
Según los cálculos del Ministerio de Salud unos mil hospitales son los que están en una mala situación económica, pero el cuarenta por ciento de esos mil son los que más preocupan al Gobierno ya que han sido declarados en alto riesgo financiero.
Se tiene previsto que algunos de los usos que se le darán a los recursos que sean liberados serán: planes de saneamiento financiero, complementar la unidad de pago por capitación del régimen subsidiado, esfuerzo propio de los municipios para los hospitales.
El proyecto de ley ha contado con todo el respaldo del Gobierno Nacional y así ha quedado evidenciado en la realización de cada uno de los debates en donde se ha visto al ministro Gaviria.
A su turno el presidente Juan Manuel Santos se refirió a la importancia de la iniciativa y aunque indicó que el modelo básico de salud se va a mantener “estamos estudiando la posibilidad de que en ciertos departamentos, en ciertas zonas del país, el régimen de aseguramiento de pronto no sería lo más conveniente para imponer”. El Jefe de Estado ha venido manteniendo conversaciones con funcionarios del Gobierno y con expertos en el tema de salud para definir las estrategias a utilizar sobre todo en aquellas regiones del país donde sólo hay un hospital.
Aunque el debate de la plenaria del Senado se desarrolló en relativa calma, los ánimos se caldearon en la sesión después de que algunos congresistas denunciaran que en el texto aprobado se les ‘coló un mico’.
El artículo al que hacen referencia es aquel que cambia el uso de todo el dinero que el Gobierno gira a las cajas de compensación para desarrollar proyectos de promoción y prevención y campañas dirigidas al fomento y desarrollo de las personas. Es decir, que a través de esa proposición los recursos girados por el Estado podrían ser utilizados para las empresas privadas para solventar problemas financieros y recuperar cartera morosa.
En diálogo con EL NUEVO SIGLO, la senadora del Polo Democrático, Gloria Inés Ramírez, expresó que la proposición aprobada parece más un salvamento para las Entidades Promotoras de Salud (EPS). “Ese proyecto de ley tal y como está aprobado es un salvamento para las EPS, porque con el discurso de salvar las clínicas y los hospitales lo que se está haciendo es salvar la cartera de éstas, que significa que se les haga un salvamento sin que se haga la reforma estructural de la Ley 100, que es lo que está pidiendo el pueblo colombiano”, señaló la senadora.
Ramírez calificó como un abuso del Gobierno el hecho de que se desconozca que el sistema de salud ha colapsado, “me parece injusto que se utilicen los recursos del Fosyga y de otros fondos y se desaceleren los ahorros que tienen las entidades territoriales para comprar la cartera a las EPS”, puntualizó.