Con el fin de fortalecer el entorno cultural, el aprovechamiento del tiempo libre y la generación de espacios de aprendizaje, Cine Colombia en alianza con la Armada Nacional inició desde julio la travesía de la Ruta 90 por aguas colombianas, cuyo fin es llevar funciones gratuitas a aquellos municipios que no cuentan con salas de cine y que por sus condiciones geográficas y económicas están apartados del resto del país.
Durante cinco meses, hasta el 15 de diciembre, buques de la Armada Nacional transportarán el teatro itinerante de la Ruta 90 Cine Colombia para llegar a zonas rurales de exótica belleza en los departamentos de Chocó, Nariño, Amazonas, Putumayo, Caquetá, Bolívar y La Guajira. Un total de 30 municipios conformados por comunidades indígenas y afrocolombianas que con alegría, sonrisas y emoción disfrutarán las películas Piratas del caribe: La venganza de Salazar y Un jefe en Pañales.
La Ruta 90 arrancó en Chocó, específicamente en Docordó, el municipio con mayor densidad de comunidades indígenas y afrocolombianas. Continuó su travesía por Pizarro, Nuquí, Bahía Solano y Juradó, poblaciones cuyas únicas vías de acceso son marítimas y fluviales.
De allí se dirigió al Valle del Cauca, donde los pobladores de Juanchaco y Buenaventura ya disfrutaron de este programa cultural. A ese primer municipio retornará el 15 de septiembre.
Para la mayoría de los asistentes la primera vez que veían cine con una proyección de alta calidad bajo las estrellas, estas zonas rurales por su difícil acceso geográfico y limitadas ofertas de entretenimiento no pueden disfrutar de esta agradable experiencia habitualmente; así mismo, los niños y niñas han encontrado en estos escenarios, sitios de socialización y entretenimiento diferentes.
Complejas maniobras de navegación
Para llevar este escenario lúdico, se deben realizar experimentadas maniobras de atraque y zarpe en muelles, en ocasiones improvisados, donde la preparación naval sale a flote en manos de una tripulación comprometida por el bienestar de la comunidad, allí tres oficiales, ocho suboficiales, un infante de marina y cinco técnicos de Cine Colombia realizan el montaje del teatro itinerante.
La marea cambiante durante ciertas horas del día y el clima lluvioso son factores naturales de difícil control que requieren planeación y evaluación del terreno para garantizar la maniobrabilidad y movilidad en los selváticos municipios costeros. Es por ello que dependiendo de las condiciones del medio ambiente se instalará el teatro en tierra y se proyectarán las películas desde el buque.
Con el fin de vincular a toda la población, las tropas de Infantería de Marina de la Armada Nacional que tienen presencia en los diferentes municipios, desarrollan previamente reuniones y gestiones con las administraciones municipales, consejos comunitarios y líderes locales para integrar a toda la comunidad.
La Ruta 90 llega este 30 de agosto a Tumaco, Nariño. La bitácora se engrosará con Guapi (7 de septiembre) y Amazonas, desde octubre, donde los moradores de El Encanto, San Rafael, Puerto Alegría, Puerto Refugio y Puerto Nariño verán la llegada del buque de la Armada y podrán disfrutar de una atractiva cartelera.
El itinerario continuará el 20 de octubre en La Tagua, al día siguiente estará en aguas de Puerto Leguízamo, Putumayo. De allí irá a los municipios vecinos de La Paya, Puerto Ospina, Puñuña Negro, Puerto Asís y concluye el recorrido por ese departamento el 9 de noviembre, en Mocoa.
El cine retomará al otro día su navegación hacia el otro extremo del país, La Guajira, donde “atracará” para su función el 20 de noviembre en Mayapo y los días siguientes en Puerto López, Castilletes, Siapana y cierra el recorrido en Punta Espada.
Y, para cerrar el buen viento y buena mar de esta innovadora idea de llevar el séptimo arte a las regiones más apartadas del país, el último escenario en su radar es el departamento de bolívar, donde el 4 de diciembre llegará a Santa Cruz del Islote, cinco días después a Arroyo Hondo y concluirá con tres días de proyecciones (del 13 al 15) en Magangué.