Rusia dijo que lamenta la suspensión, después de seis días, de las conversaciones indirectas de paz en Ginebra entre el gobierno y la oposición de Siria, y espera que la segunda ronda, a partir del 25 de febrero, sea "complicada".
"Lamentamos esta evolución, pero nadie esperaba que todo fuera sencillo y rápido", declaró a la prensa el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov.
"Nadie esperaba resultados inmediatos en la primera ronda" de contactos. "Esperamos que haya pronto aclaraciones sobre la manera en que van a continuar las conversaciones", añadió el portavoz.
"Está claro que la siguiente etapa será complicada, y esperamos que después de esta pausa veamos la próxima ronda de estas complejas negociaciones", indicó Peskov.
Durante seis días, el emisario de la ONU para Siria Staffan de Mistura conversó por separado con una delegación del gobierno y otra de la oposición. El miércoles, el diplomático anunció "una pausa", y dijo que los contactos proseguirán a partir del 25 de febrero.
Por su lado, el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, acusó a Moscú y Damasco de "estar buscando una solución militar más que permitir una solución política", y estimó que la ofensiva del ejército sirio, apoyada por la aviación rusa, pone en peligro el proceso político.