Los restos exhumados en Bucaramanga no son del cura Camilo Torres, abatido en un combate del Ejército con el Eln hace casi 50 años, informó esta tarde la Fiscalía.

 

“El pasado 25 de enero se realizó una diligencia de exhumación en el cementerio municipal de Bucaramanga a petición de la familia del sacerdote Camilo Torres Restrepo. La familia hizo esa solicitud sobre la base de información con que se contaba con que en esa bóveda se encontraba inhumado. Luego de haber hecho los cotejos de ADN se logró establecer que no se trata de Camilo Torres sino que por el contrario se trata de Mario Benardino Cáceres Dueñas, como lo decía la bóveda por cuanto el análisis de ADN arrojó sobre 25 marcadores una precisión del 99,9 por ciento”, manifestó el fiscal encargado Jorge Fernando Perdomo.

 

El alto funcionario judicial precisó que tanto Medicina Legal como la Fiscalía tienen evidencias de que los restos se encuentran enterrados en ese mismo cementerio, pero no se ha establecido entonces con exactitud la bóveda en que se encuentran.

 

“Ha sido difícil ya que no se cuentan con registros históricos claros de donde se puedan encontrar él enterrado, nosotros teníamos una información y la familia también y se presumía que en esa bóveda podía estar ya que allí fue la primera en donde se depositaron cuerpos en esa época por eso se presumía que ahí podía estar pero los análisis mostraron que no”, dijo Perdomo.