El presidente de Ecuador, Rafael Correa, posesionó el viernes a cinco nuevos ministros, incluido el de Defensa, y alertó sobre los planes de la oposición para desgastar al gobierno mediante protestas como en Venezuela.

Correa, en el poder desde 2007, reajustó su gabinete tras el revés electoral de febrero, cuando el oficialismo perdió en los comicios municipales importantes alcaldías como las de Quito, Guayaquil y Cuenca, si bien se mantuvo como la principal fuerza a nivel nacional.

El mandatario izquierdista juramentó a Fernando Cordero como nuevo ministro de Defensa en reemplazo de María Fernanda Espinosa y César Navas como ministro coordinador de Seguridad, cartera que era ocupada por Cordero.

Asimismo, designó a Augusto Espín como nuevo ministro de Telecomunicaciones y a Sandra Naranjo y Francisco Borja en los ministerios de Turismo y Cultura, respectivamente. Sus antecesores habían presentado su renuncia en pasados días.

Durante el acto de juramentación, el mandatario llamó la atención sobre los planes de la oposición tras la protesta del 17 de septiembre que dejó 34 policías heridos, algunos de gravedad, y 53 detenidos, la mayoría estudiantes.

"Tenemos que enfrentar a restauración conservadora que nos quiere volver al pasado. Nos quedan menos de tres años de gobierno y los retos son tantos y tan grandes", declaró Correa.

En ese sentido, dijo que su gobierno está enfrentando el "mismo libreto" que intentó la oposición en Venezuela, Bolivia y Argentina.

"La estrategia es calentar las calles, luego tratar de afectar la autoridad y legitimidad del gobierno, buscando incluso que se subleve la fuerza pública (...) para finalmente intentar derrocar al gobierno o desgastarnos lo más posibles para las elecciones de 2017", sostuvo Correa.

Tras el traspié electoral del 23 de febrero, Correa inició una renovación a cuenta gotas de su gabinete y cambió a siete ministros que presentaron su renuncia. El gobierno ecuatoriano está integrado por 27 carteras de Estado./AFP