La jefa del gobierno alemán, Angela Merkel, pronunció el jueves un discurso en el parlamento británico en el que dijo que la Unión Europea necesita al Reino Unido pero evitó apoyar las reformas que reclama Londres.

"Necesitamos un Reino Unido fuerte con una voz enérgica en la Unión Europea. Si lo tenemos, seremos capaces de hacer los cambios para beneficio de todos", dijo Merkel en el momento más relevante de su visita a la capital británica.

Merkel se dirigió a ambas cámaras del parlamento, reunidas en la Galería real del palacio de Westminster. De este modo, se suma a su homólogo Willy Brandt y al presidente Richard von Weizsäcker, que, en 1970 y 1986, respectivamente, ya disfrutaron de ese honor.

El primer ministro --presionado por los euroescépticos de su campo y por la pujanza del partido populista y eurófobo UKIP a poco de las elecciones europeas-- se comprometió a recuperar ciertas prerrogativas cedidas en el pasado a Bruselas y "a mejorar el funcionamiento de la Unión Europea".

Tras ello, pretende convocar un referéndum, en 2017, para preguntar a los británicos si quieren seguir en la UE.

Merkel dijo que no había venido a Londres a expresar apoyo al proyecto reformista de Cameron, ni tampoco a complacer a quienes piensan que "el resto de Europa no está preparada para mantener al Reino Unido en la UE a cualquier precio".

En cualquier caso, la jefa de gobierno reivindicó el europeísmo de Londres pese a las crisis con Bruselas.

"¿Qué hubiera sido de Europa si la gente de su país no hubiera opuesto resistencia?" en las dos guerras mundiales contra Alemania, se preguntó Merkel.

"Gran Bretaña no necesita demostrar su compromiso con Europa", sentenció.

La jefa del gobierno almorzó con Cameron, con quien ofreció una conferencia de prensa antes de ir al palacio de Buckingham a tomar té con la reina Isabel II.

Downing Street presentó la visita como una oportunidad de atraer las simpatías de Merkel -"la reina de Europa", como la llamó un periodista en la conferencia de prensa- por la agenda reformista de Cameron.

Así, la prensa británica contrastó el trato dado a Merkel con el dispensado al presidente francés François Hollande, que fue recibido en enero en una base aérea lejos de Londres e invitado a almorzar en un pub.

-El mundo vigila a Rusia-

En la conferencia de prensa, Cameron dijo a Rusia que tiene que respetar la integridad territorial de Ucrania.

Todos los países tienen que respetar la integridad territorial y la soberanía de Ucrania. Rusia se ha comprometido a hacerlo y es importante que cumpla su palabra, el mundo estará vigilando", dijo Cameron.

Cameron hizo estas declaraciones mientras se complica la situación en la península ucraniana de Crimea, donde decenas de hombres armados prorrusos se apoderaron el jueves de edificios oficiales en respuesta a la insurrección que derrocó al presidente Viktor Yanukovich, un aliado de Moscú que buscó refugio en Rusia.

El premier dijo que a Rusia le interesa la estabilidad de Ucrania. "No se trata de obligar a los ucranianos a elegir entre Rusia y Europa. Nos interesa a todos tener una Ucrania estable y próspera, con relaciones estrechas con sus vecinos, y todos, incluida Rusia, tenemos que trabajar para ello".

Por su parte, Merkel dijo que "la integridad territorial de Ucrania es de importancia capital" para Alemania./AFP