Dos personas que habían sido secuestradas en Bogotá, Juan Camilo Romero y Juan Fernando Guerrero, fueron localizados en un cambuche en zona rural de Chivor, cerca al municipio de Guateque, Boyacá.
Los dos hombres fueron plagiados el pasado 30 de mayo cuando salieron de rumba al centro de la capital y no volvieron a contestar sus celulares hasta el 2 de julio cuando se comunicaron telefónicamente con el padre de Juan Camilo a quien le exigieron 3.000 millones de pesos por la liberación.
Los delincuentes se hicieron pasar como miembros de Los Rastrojos para logar su objetivo.
Los secuestradores llamaron nuevamente y entregaron un video en el que uno de los secuestrados dice que está bien pero que por favor paguen y que quienes los tienen secuestrados son la banda denominada Los Rastrojos.