En el  primer trimestre de este año el sector agropecuario presentó un repunte al registra un incremento de 6,1 por ciento principalmente por efectos del aumento de la producción cafetera.

El ministro de Agricultura Rubén Darío Lizarralde explicó que es la oportunidad para atraer inversión extranjera.

El titular de la cartera manifestó que el positivo crecimiento se refleja en el buen comportamiento de los cultivos transitorios permanentes y la recuperación de la producción cafetera.

La economía nacional creció 6,4% en el primer trimestre. En materia agrícola y pecuaria este indicador repuntó frente al trimestre anterior donde reportó un aumento de 2,9%, cuando los demás sectores lo hacían en menos de un dígito.

“Este resultado nos indica que el crecimiento del sector está siendo sostenible. Esto hace que los inversionistas miren de una manera muy atractiva y muy positiva a nuestro sector”, señaló el Ministro Lizarralde durante un encuentro con mandatarios locales, campesinos y toda la institucionalidad en el marco del encuentro del Diamante Agropecuario Caribe y Santanderes en Cúcuta.

En ese sentido el funcionario destacó la importancia de seguir trabajando mancomunadamente con productores, empresarios y gremios para generar mejores resultados que le permiten al país más oportunidades en los mercados nacionales e internacionales.

“Estamos implementando las estrategias de política agropecuaria correctas y seguiremos en esa dirección”, señaló.

Así mismo, el jefe de la cartera agropecuaria se refirió a la estrategia Diamante Agropecuario con la cual en los departamentos relacionados se está reconociendo cuál es la oferta, cuáles son las posibilidades y cuáles mercados se van a conquistar.

“El mensaje que queremos mandar es que las personas que estén interesadas en trabajar su tierra de acuerdo con la vocación de la misma y en función de los mercados tienen todo el apoyo del Gobierno”, puntualizó Lizarralde Montoya.

Agregó que el dinamismo mostrado tanto por el crecimiento del PIB Nacional como el Agropecuario, se refleja en la creación de empleo formal.

“Este crecimiento se traduce en la generación de miles de empleos para todos los sectores de la economía nacional, permitiendo mejores oportunidades en la formalidad”, puntualizó el Ministro.

Necesidades

Cabe recordar que justamente Lizarralde indicó recientemente que el sector del agro demanda cada vez más recursos y que el presupuesto mínimo anual debe ser de 10 billones de pesos.

Explicó que los actuales recursos suman 5 billones y los adicionales para el 2015 se destinarían a infraestructura y tecnología para garantizar la disponibilidad de agua para la producción.

“Los elementos fundamentales, prioritarios en los cuales deberíamos invertir es en  el manejo de agua, expresado en riegos y drenajes, canalizaciones y embalses, que además sirven para reducir el impacto de fenómenos como el de La Niña o El Niño. Los otros son vías terciarias, investigación y desarrollo y asistencia técnica”, expresó el Ministro en el marco de la cuarta parada del Diamante Agropecuario Caribe y Santanderes, en Cúcuta.

La inversión adicional es necesaria para aprovechar la demanda mundial por alimentos, el amplio potencial agrícola del país

-cultivamos menos del 25% del área que se podría utilizar-,  conquistar los mercados internacionales y darles impulso a los programas de apoyo a la  competitividad y productividad.

Así mismo, en un análisis realizado junto con el Incoder se determinó que dotar de infraestructura  y  tecnología  de  riego  y  drenaje a más de 2.5 millones de hectáreas, una de las metas mega del Ministerio tiene un costo de 56.5 billones de pesos.