Los aspirantes presidenciales republicanos Ted Cruz y John Kasich decidieron formar un frente común para tratar de impedir una victoria avasalladora de Donald Trump y dejar la decisión en manos de la convención partidaria, infomaron sus equipos de campaña.

El polémico multimillonario encabeza las primarias del opositor partido Republicano, pero Cruz y Kasich desean impedir que sume el número necesario de delegados para garantizar la nominación y forzar una convención 'abierta' para bloquearlo.

El martes se realizarán primarias en Connecticut, Delaware, Maryland, Pensilvania y Rhode Island, estados en los que Trump aparece al frente en todos los sondeos.

Trump tiene hasta el momento 846 delegados, Cruz aparece con 563 y Kasich conquistó 147, y para garantizar la nominación son necesarios 1.237 delegados.

De acuerdo con Jeff Roe, jefe de campaña de Cruz, la idea es que su equipo se concentre en los electores de Indiana, donde tiene buenas posibilidades de ganar, y dejar que el equipo de Kasich se concentre en Oregon y Nuevo México, estados donde aparece bien situado en los sondeos.

Llegar a las elecciones presidenciales de noviembre con Trump en las boletas electorales "sería un seguro desastre para los republicanos", señaló Roe en un comunicado.

En tanto, el equipo de Kasich emitió una declaración en tono similar: "Nuestro objetivo es tener una convención abierta en Cleveland (en julio), donde estamos confiados que emergerá un candidato capaz de unir al partido y ganar en noviembre".

- "Desesperación" -

Trump, quien estuvo la semana pasada en medio de la polémica por su supuesto cambio de 'personaje' en la campaña, volvió a ser fiel a su estilo y recurrió a la red social Twitter para expresar su punto de vista.

Cruz y Kasich "van a conspirar para mantenerme lejos de la nominación republicana. DESESPERACIÖN!", afirmó Trump.

La semana pasada, Trump había llamado la atención al referirse en actos públicos al "senador Ted Cruz", pero en su mensaje en Twitter volvió a llamarlo "Lyin' Ted" (Ted el Mentiroso).

El permanente duelo verbal entre Trump y Cruz subió varios decibeles después que un asesor del polémico multimillonario, Paul Manafort, dijo a dirigentes republicanos que el aspirante estaba apenas representando un personaje en esta fase de la elección partidaria.

Por ello Cruz aumentó sus críticas afirmando que Trump estaba "mintiendo a todos". Trump, dijo Cruz, estaba fingiendo ser un conservador para engañar a "electores tontos".

Trump respondió que Cruz estaba tratando de "sobornar" delegados para que lo apoyen en la convención partidaria, y volvió a la carga contra el sistema de elección interna en el partido, que definió como "torcido".

Para Trump, el electorado conservador ya dejó claras sus preferencias, y cualquier tentativa de bloquear su nominación representará una burla de la conducción republicana a la voluntad de sus propios electores.

En un comunicado, Trump aseguró que Cruz y Kasich están "matemáticamente muertos, y este acto muestra (...) como sus campañas realmente son frágiles".

Para Trump, Cruz está "en caída libre", y Kasich "sigue en carrera pero tiene menos delegados que Marco Rubio, que abandonó su campaña hace un mes".

Los republicanos realizarán su convención nacional del 18 al 21 de julio en Cleveland, Ohio.

- Nueva batalla demócrata -

En el campo Demócrata, el número de delegados en juego en la jornada del martes no será suficiente como para que la aspirante Hillary Clinton define la disputa interna con el senador Bernie Sanders.

Sin embargo, victorias de Clinton en los cinco estados en que se realizarán consultas internas el martes llevarían a un nivel insoportable las presiones para que Sanders decida arrojar la esponja.

Las presiones comenzaron ya el fin de semana, cuando el equipo de campaña de Clinton filtró a la prensa que su grupo más próximo de asesores comenzó a analizar eventuales opciones para escoger a un compañero de fórmula presidencial, dando su nominación como un hecho consumado.

Fuentes de la campaña de Sanders, sin embargo, se niegan a dar la batalla por perdida y apuestan todas sus fichas a las primarias de California, previstas para el 7 de junio.

La convención nacional demócrata para seleccionar su candidato presidencial se realizará del 25 al 28 de julio en Filadelfia, Pensilvania.