El candidato republicano a las elecciones presidenciales de Estados Unidos admitió este martes por la noche su derrota ante el demócrata Barack Obama en una intervención ante miles de partidarios en su cuartel de campaña, en Boston (Massachussetts, noreste).
"Acabo de llamar al presidente Obama para felicitarle por su victoria", dijo Romney, ex gobernador de Massachussetts.
"Este es un momento de grandes desafíos para América y rezo para que el presidente tenga éxito guiando a nuestra nación", agregó.
"Sus partidarios y su campaña también merecen ser felicuitados", agregó el candidato derrotado, cuya familia salió a acompañarle al acabar la intervención.
La mayoría de los 51 estados votan históricamente lo mismo, por lo que las elecciones se decantan gracias a un puñado de estados como Ohio, Iowa, Virginia o New Hampshire, en los que Romney no logró imponerse.
Con su derrota en las presidenciales estadounidenses, Romney culmina una carrera llena de éxitos profesionales y de fracasos políticos.
Romney, mormón, millonario de 65 años padre de cinco hijos y abuelo de 18 nietos, perdió en 1994 unas elecciones a senador y en 2008 abandonó su carrera a la Casa Blanca en las primarias republicanas, que ganó John McCain.