Rebeldes en la República Democrática del Congo, este de África, tomaron una nueva ciudad mientras se acercan a la vital capital provincial de Goma, indicó el sábado la Organización de Naciones Unidas.

Un portavoz de la ONU sostuvo que la ciudad de Kibumba, 25km al norte de Goma, cayó en manos del grupo M23 a pesar de los ataques de helicópteros de la organización internacional en ayuda de fuerzas del gobierno de Congo.

La fuente dijo que las fuerzas del gobierno de la República Democrática del Congo y las de la misión de la ONU, MONUSCO, "están tratando de contener a un posible avance del M23 hacia Goma, en Kibati".

El anuncio de la caída de Kibumba ocurre en momentos en que el Consejo de Seguridad de la ONU había citado a una reunión de emergencia este sábado para discutir la situación y Francia había pedido abordar la ofensiva del M23 en esta región rica en minerales.

La ONU está convencida de que los rebeldes cuentan con apoyo de los vecinos Ruanda y Uganda y en ese sentido el secretario general del organismo, Ban Ki-moon, habló con el presidente de ese último país, Paul Kagame, para apelar a su ayuda y frenar el avance rebelde.

El M23 está formado principalmente por exrebeldes que, tras unirse en 2009 al ejército, se amotinaron el pasado abril. Desde entonces, combaten a las fuerzas regulares en la región oriental de Kivu.

Fuerza de paz.

Naciones Unidas había expresado el viernes que colocó bajo "alerta máxima" a sus tropas de paz en la oriental República Democrática del Congo, mientras el jefe de la organización Ban Ki-moon volvió a condenar la ayuda externa otorgada a rebeldes para combatir al gobierno.

Unidades de reacción rápida entre las tropas de la ONU fueron desplazadas a áreas claves alrededor de la capital provincial de Goma, tras choques armados entre rebeldes del M23 y tropas gubernamentales el jueves, los cuales dejaron numerosas bajas según diversos informes.

Martin Nesirky, portavoz de la ONU, aseguró que esos "equipos de reacción rápida" fueron enviados a Goma, capital de la provincia de Kivu, y al aeropuerto de la ciudad, luego de los reportes de enfrentamientos.

Nesirky acotó que las tropas desplegadas para la misión de la ONU, conocidas oficialmente como MONUSCO, fueron puestas "en alerta máxima" con apoyo potencial de helicópteros de ataque.

"Informes no confirmados indican que el M23 registró un alto número de víctimas en el enfrentamiento", dijo Nesirky, aunque un portavoz del grupo negó las afirmaciones del gobierno de que más de 110 rebeldes murieron en la batalla.

El combate fue el más grave para la rebelión desde julio pasado, cuando los helicópteros de la ONU entraron en acción contra ella M23.

El M23 se separó del ejército nacional en abril, y el viernes Ban dijo en un informe público que los rebeldes ahora representan una amenaza a largo plazo para el gobierno.

Por su parte, Nesirky dijo que Ban se manifestó "molesto por continuos reportes de apoyo externo al M23", aunque no mencionó países.