Corea del Norte ha retirado dos misiles de sus sitios de lanzamiento en la costa este del país, dijeron este lunes altos funcionarios estadounidenses, que señalaron una disminución de las tensiones con Pyongyang a pesar de que el régimen norcoreano volvió a amenazar este lunes a su vecino del sur.
Los misiles estuvieron en todo momento listos para ser lanzados, pero "los retiraron" y ya no hay una amenaza inminente, dijo a la AFP un funcionario de Defensa estadounidense que se mantuvo en el anonimato.
Dos misiles de tipo Musudan habían sido desplegados en la costa este de Corea del Norte en medio de una serie de amenazas de guerra nuclear por parte del régimen de Pyongyang. Tanto el gobierno de Estados Unidos como el de Corea del Sur y Japón temieron un disparo de prueba coincidiendo con la fiesta nacional del 15 de abril.
Como consecuencia, Japón y Corea del Sur pusieron en alerta sus defensas antimisiles mientras que Estados Unidos movilizó dos barcos de guerra con equipos antimisiles y un poderoso radar con alcance en la zona de un posible lanzamiento.
Pero Corea del Norte se abstuvo de realizar un disparo y bajó el nivel de sus ataques retóricos. El portavoz del Pentágono, George Little, valoró el lunes de manera positiva la "pausa de las provocaciones" norcoreanas.
Según los responsables estadounidenses la retirada de los misiles aleja la posibilidad de un ataque inminente ya que el gobierno norcoreano tendría que llevar a cabo numerosos preparativos si quisiera utilizarlos.
El anuncio se produce la víspera de la visita a Washington de la presidenta de Corea del Sur, Park Geunhye, quien será recibida el martes en la Casa Blanca por el presidente Barack Obama. Los gobiernos de Washington y Seúl tienen previsto afianzar su alianza estratégica.
Park ha hecho gala de firmeza ante las amenazas del su vecino del norte, pero ha dejado la puerta abierta a eventuales negociaciones, una postura que comparte con la administración Obama.
Nuevas amenazas norcoreanas
A pesar de estas señales de apaciguamiento, Corea del Norte amenazó este martes con represalias inmediatas en caso de que una sola bomba caiga de su lado de la frontera marítima en disputa durante ejercicios navales Corea del Sur-Estados Unidos.
Toda escalada militar significará que las islas fronterizas de Corea del Sur se vean envueltas en "un mar de llamas", advirtió en un comunicado el comando suroeste de las Fuerzas Armadas norcoreanas.
Los ejercicios de artillería con municiones reales cerca de la frontera del Mar Amarillo fueron un intento de convertir a las tensiones existentes en una "guerra real", agrega la declaración difundida por la Agencia Central Koreana de Noticias (KCNA).
Las tropas norcoreanas presentes cerca de esa zona recibieron la orden de tomar "medidas de respuesta inmediata en caso de que una sola bomba" atraviese la frontera.
Corea del Sur y Estados Unidos estarían realizando hasta el viernes próximo una serie de ejercicios antisubmarinos cerca de la frontera marítima, en los que participan el submarino nuclear norteamericano USS Bremerton y otras naves./AFP