Refuerzos españoles para intervención francesa en Malí | El Nuevo Siglo
Viernes, 18 de Enero de 2013

España enviará a Malí un avión de transporte de personal y 50 asesores para entrenar a soldados de ese país, pero no participará directamente en acciones de combate, afirmó este viernes el ministro de Defensa, Pedro Morenés.

El gobierno ha autorizado "poner a disposición como transporte estratégico, como transporte de personal, un avión Hércules C-130", dijo Morenés.

El avión tendría como uno de sus principales objetivos contribuir al rápido traslado de fuerzas de la Comunidad Económica de Estados de Africa Occidental (CEDEAO), que ha decidido enviar militares a Malí.

España enviará además "entre 40 y 50 adiestradores" dentro de la misión europea para entrenar al ejército maliense, añadió el ministro, quien insistió en la "no participación española en temas de combate".

Madrid busca ayudar al "esfuerzo de nuestros aliados via la cooperación allí en Malí con el avión y aquí con la utilización del espacio aéreo", explicó Morenés, reiterando que se ha autorizado el sobrevuelo de territorio español por parte de aviones franceses y de otros países inmersos en las operaciones en Malí.

No obstante, "los aviones que utilicen armamento tendrán que sobrevolar más allá de las 12 millas de seguridad fuera de la costa española", dijo Morenés.

Madrid "se ha planteado su contribución, al aspecto de contener esa ofensiva del norte (por parte de grupos islamistas armados, ndlr). Es muy importante para los intereses generales de España", añadió el ministro.

La caída de la localidad malienses de Konna durante una ofensiva sorpresa de los combatientes islamistas el 10 de enero, cuando el frente entre el ejército maliense y los grupos armados islamistas estaba congelado desde hacía meses, desencadenó la intervención de Francia, primero con ataques aéreos y después con operaciones terrestres.

Más de 1.400 soldados franceses están desplegados en Malí y deberían llegar próximamente a los 2.500, según París, mientras que a Bamako han llegado ya los primeros elementos de la fuerza de intervención de África Occidental (MISMA) —cuya misión consiste en expulsar a los grupos armados que ocupan una gran parte de Malí desde hace nueve meses—.

Recuperan Konna

El ejército malí, con apoyo de las tropas francesas, reanudó este viernes su progresión y retomó el control de la ciudad de Konna (centro), hasta ahora en manos de los islamistas, que reivindicaron el secuestro masivo en una planta de gas de Argelia.

En Argelia, los países que tienen a algunos de sus ciudadanos entre los rehenes junto a otros cientos de empleados locales en una planta de gas en el Sahara temían este viernes un balance muy elevado de víctimas tras el asalto lanzado por el ejército argelino contra un comando islamista llegado de la vecina Libia.

La agencia de prensa argelina APS había anunciado el jueves el fin de la operación, pero según un comunicado del Foreign Office (cancillería británica) del viernes, "el incidente terrorista en Argelia continúa".

El comando islamista, que aparentemente llegó de Libia, afirmó en un comunicado que había actuado en represalia por la decisión de Argelia de abrir su espacio aéreo a Francia para que pueda intervenir en Malí.

La situación en la planta de gas eclipsó la situación en Malí, donde Francia continúa sus ataques aéreos contra los grupos islamistas, acompañados de una operación terrestre cada vez más importante.

Más de 1.400 soldados franceses ya se encuentran en Malí, una cifra que pronto llegará a 2.500, según París.

El viernes, el ejército malí afirmó que la víspera había recuperado "el control total" de Konna (centro), una localidad que se encuentra en la carretera de Bamako, que el 10 de enero cayó en manos de los islamistas, lo que precipitó la intervención francesa en Malí.

"Hemos recuperado el control total de la localidad de Konna, después de haber hecho sufrir fuertes pérdidas al enemigo", aseguró el ejército malí en un breve comunicado.

La información fue confirmada por una fuente de seguridad regional y por habitantes de la zona preguntados por la AFP, en una región que sigue inaccesible a los observadores independientes.

Durante el día y la noche del miércoles se registraron combates entre soldados malíes, apoyados por militares franceses, y los islamistas armados cerca de Konna.

Nuevos ataques franceses

El jueves se produjeron nuevos ataques aéreos franceses que permitieron que los soldados malíes pudieran entrar en esa ciudad, según una fuente de seguridad.

El ministro francés de la Defensa, Jean-Yves Le Drian, reconoció el 15 de enero que Konna, a 700 km al noreste de Bamako, todavía no había sido recuperada por el ejército malí, contrariamente a sus afirmaciones.

Un portavoz de Ansar Dine, un grupo islamistas radical, Abul Habib Sidi Mohamed, había afirmado el martes que los grupos armados islamistas seguían controlando la ciudad de Konna.

La caída de Konna durante una ofensiva sorpresa de los combatientes islamistas el 10 de enero, cuando el frente entre el ejército maliense y los grupos armados islamistas estaba congelado desde hacía meses, desencadenó la intervención de Francia, que temía que los islamistas avanzaran hacia Bamako, primero con ataques aéreos y después con operaciones terrestres.

En Bamako, los primeros elementos de la fuerza de intervención de África Occidental (MISMA) —cuya misión consiste en expulsar a los grupos armados que ocupan una gran parte de Malí desde hace nueve meses— llegaron el jueves al anochecer a Bamako.

Aproximadamente 2.000 miembros de esta fuerza, dirigida por un general nigeriano, Shehu Abdulkadir, serán desplegados en Malí hacia el 26 de enero.

Ocho países de África occidental —Nigeria, Togo, Benín, Senegal, Níger, Guinea, Ghana y Burkina Faso— así como Chad, anunciaron su contribución a la MISMA. En total, unos 5.300 soldados del continente africano serán desplegados en Malí, para reemplazar más adelante al ejército francés.

La Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) se reúne el sábado en Abiyán para una cumbre extraordinaria dedicada a Malí. Francia anunció el viernes que su ministro de Relaciones Exteriores, Laurent Fabius, participará en la misma.

AFP